Publicado

2011-01-01

Duelo del analista e identificación con el síntoma

Duel of the analyst and identification with the symptom

Duel de l'analyste et une identification avec le symptôme

Palabras clave:

duelo, analista, identificación, síntoma, final de análisis (es)
mourning, analyst, identification, symptom, end of analysis (en)
deuil, analyste, identification, symptôme, fin d´analyse (fr)

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Autores/as

  • David Andrés Vargas Castro Universidad de Buenos Aires, Buenos Aires, Argentina.
A partir de los desarrollos hechos por Lacan en el seminario La transferencia, este artículo extrae lo que podría denominarse el “duelo por el analista”. Un duelo en el que se pone en evidencia que ningún objeto de amor puede colmar el deseo. De igual manera, se plantea como consecuencia lógica de este duelo el hecho de que Lacan, al final de su enseñanza, proponga la identificación con el síntoma en el fin del análisis, ya que es posible, vía referencias freudianas, considerar que en todo duelo —no solo en su transcurrir sino en su culminación— se produce alguna identificación.

On the basis of Lacan’s proposals in his Transference seminar, the article examines a particular type of mourning, the mourning of the analyst, which reveals the incapacity of any object of love to fulfill desire. It also examines why, as a logical consequence of mentioned mourning, Lacan suggests that the identification with the symptom constitutes the end of the analysis. Thus, through Freudian references, it is possible to say that some kind of identification takes place in all type of mourning, not only in its process, but also in its end.

Ce qu’on peut appeler « deuil de l’analyste » peut se déduire des élaborations avancées par Lacan au séminaire Le transfert. Il s’agit d’un deuil qui met en évidence qu’aucun objet d’amour ne peut combler le désir. De même, une conséquence logique peut en être tirée, proposée par Lacan vers la fin de son enseignement: l’identification au symptôme en fin d’analyse, car on peut considérer, via les indications freudiennes, que tout deuil suppose quelque identification, pas seulement dans son parcours mais surtout à sa fin.

Duelo del analista e identificación con el síntoma

David Andrés Vargas Castro* 

Universidad de Buenos Aires, Argentina 

e-mail: vargascastrod@yahoo.com.ar 


Duelo del analista e identificación con el síntoma

Resumen

A partir de los desarrollos hechos por Lacan en el seminario La transferencia, este artículo extrae lo que podría denominarse el “duelo por el analista”. Un duelo en el que se pone en evidencia que ningún objeto de amor puede colmar el deseo. De igual manera, se plantea como consecuencia lógica de este duelo el hecho de que Lacan, al final de su enseñanza, proponga la identificación con el síntoma en el fin del análisis, ya que es posible, vía referencias freudianas, considerar que en todo duelo —no solo en su transcurrir sino en su culminación— se produce alguna identificación.

Palabras clave: duelo, analista, identificación, síntoma, final de análisis. 


Deuil de l’analyste et identification au symptôme

Résumé

Ce qu’on peut appeler « deuil de l’analyste » peut se déduire des élaborations avancées par Lacan au séminaire Le transfert. Il s’agit d’un deuil qui met en évidence qu’aucun objet d’amour ne peut combler le désir. De même, une conséquence logique peut en être tirée, proposée par Lacan vers la fin de son enseignement: l’identification au symptôme en fin d’analyse, car on peut considérer, via les indications freudiennes, que tout deuil suppose quelque identification, pas seulement dans son parcours mais surtout à sa fin.

Mots-clés: Deuil, analyste, identification, symptôme, fin d´analyse. 


Mourning of the analyst and identification with the symptom

Abstract

On the basis of Lacan’s proposals in his Transference seminar, the article examines a particular type of mourning, the mourning of the analyst, which reveals the incapacity of any object of love to fulfill desire. It also examines why, as a logical consequence of mentioned mourning, Lacan suggests that the identification with the symptom constitutes the end of the analysis. Thus, through Freudian references, it is possible to say that some kind of identification takes place in all type of mourning, not only in its process, but also in its end.

Keywords: mourning, analyst, identification, symptom, end of analysis. 


“Tal si fuese la vida lo que el amante busca, cuántas veces pisaste este sendero oscuro adonde el cuco silba entre los olmos, aunque no puede el labio beber dos veces de la misma agua, y al evocar la hondura una imagen distinta respondía, evasiva a la mente, ofreciendo, escondiendo la expresión inmutable, la compañía fiel en cuerpos sucesivos, que el amor es lo eterno y no lo amado” 

Luis Cernuda 


Freud, en su célebre texto “Duelo y melancolía”1, pone en relación la identificación y la melancolía, al considerar que en esta se produce una identificación narcisista, cuestión que no plantea que suceda en el duelo. Por otra parte, en el seminario La transferencia2, Lacan nos habla de un duelo que concierne al analista en su deseo y función, duelo en el cual se advierte que en el plano del deseo no hay objeto de amor que pueda colmarlo, que tenga privilegio alguno. 

A continuación desarrollaré lo que Lacan señala a propósito de este duelo, que podemos llamar duelo del analista, y, sirviéndome de referencias freudianas, pensaré la identificación con el síntoma al final del análisis como consecuencia del duelo en cuestión, al plantear que como efecto de todo duelo se produce alguna identificación. 

A propósito de un “cierto duelo” 

En el seminario 8 sobre La transferencia, Lacan realiza un comentario al texto El Banquete, de Platón, para pensar algunos asuntos concernientes a este vínculo que cobra un carácter especial en un proceso analítico:  

Rompiendo con la tradición que consiste en abstraer, neutralizar y vaciar de todo su sentido lo que puede estar en juego en el fondo de la relación analítica, pretendo partir del extremo de lo que supone el hecho de aislarse con otro para enseñarle, ¿qué? —lo que le falta—. Situación todavía más temible, si pensamos precisamente que por la naturaleza de la transferencia eso que le falta lo aprenderá como amante.3 

1. Sigmund Freud, “Duelo y melancolía” (1915), en Obras completas, vol. XIV, (Buenos Aires: Amorrortu, 2001). 2. Jacques Lacan, El seminario. Libro 8. La transferencia (Buenos Aires: Paidós, 2004). 

Se servirá, en especial, de lo que acontece en dicho texto a propósito de la posición de Sócrates, quien se muestra inconmovible frente a los elogios amorosos de Alcibíades y a quien le dirá que dicho elogio no lo tiene como destinatario, sino a Agatón. Es en este señalamiento por parte de Sócrates a Alcibíades que Lacan lee la interpretación que revela la puesta en acto de la realidad del inconsciente que es la transferencia, así como se interroga sobre la posición de Sócrates para pensar el deseo del analista. En la última clase de este seminario, Lacan hace alusión a un “cierto duelo”4 que concierne al analista, a propósito del cual dice lo siguiente: 

Lo que Sócrates sabe y el analista debe al menos entrever, es que en el plano de a minúscula la cuestión es muy distinta de la del acceso a ningún ideal. El amor sólo puede rodear esta isla, este campo del ser. Y el analista, por su parte, sólo puede pensar que cualquier objeto puede rellenarlo. He aquí adonde nosotros, analistas, nos vemos conducidos a oscilar, en ese límite en el que, con cualquier objeto, una vez que ha entrado en el campo del deseo, se plantea la cuestión —¿qué eres tú? No hay objeto que valga más que otro— éste es el duelo a cuyo alrededor se centra el deseo del analista.5 

Podemos hablar entonces de un duelo del analista, en donde el sujeto, confrontado a su posición de objeto de deseo, pierde todo privilegio que, presentándose como amable, como objeto de amor, espera recibir del Otro. Pero también duelo del analista, entendiendo este “del” en tanto genitivo objetivo-subjetivo: un duelo que hace el analista, así como un duelo que se le hace al analista. 

Ahora bien, ¿en qué es similar el analista a Sócrates? En que está habitado por un deseo más fuerte que el de dejarse seducir por el amor, “en tanto que en él se ha producido una mutación en la economía de su deseo”6, además de estar advertido de que “[…] en la medida en que el deseo interviene en el amor y es lo que esencialmente se pone en juego en él, el deseo no concierne al objeto amado”7. 

3. Ibíd., 24.

4. Ibíd., 440.

5. Ibíd.

6. Ibíd., 215.

7. Jacques Lacan, El seminario. Libro 10. La angustia (Buenos Aires: Paidós, 2006), 168. 

¿Se tratará entonces de que el analista sea un Sócrates? Lacan nos dice que no, en tanto que el analista, al estar advertido de la transferencia, no interpretará la transferencia, tal como lo hizo Sócrates a Alcibíades, sino que se servirá de ella, se dejará tomar por ella a sabiendas de que no es con él, pero no posible sin él; la vía transferencia conducirá al sujeto al encuentro con la falta en el Otro: 

Tan sólo como lectores de Freud, ya sabrán algo de lo que, al menos a primera vista, se presenta como la paradoja de aquello que aparece para nosotros como término, télos, desenlace, terminación del análisis. ¿Qué nos dice Freud? —sino que a fin de cuentas, lo que encontrará al final quien sigue este camino es esencialmente una falta—”8. 

Lacan retomará en el seminario Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis la distancia entre el ideal y el a que ha de producirse en el análisis, al denotar la esencia de engaño que comporta el amor en el registro de lo especular: 

El punto del ideal del yo es el punto desde el cual el sujeto se verá, según dicen, como visto por el otro —esto le permitirá sostenerse en una situación dual satisfactoria para él desde el punto de vista del amor—. Como espejismo especular, el amor tiene esencia de engaño. Se sitúa en el campo instituido por la referencia al placer, por ese significante único requerido para introducir una perspectiva centrada en el punto ideal, I mayúscula, que está en el Otro, desde donde el Otro me ve tal como me gusta que me vean.9 

De allí que considere que una de las funciones del deseo del analista sea la de separar el ideal del objeto a: 

Si la transferencia es aquello que de la pulsión aparta la demanda, el deseo del analista es aquello que la vuelve a llevar a la pulsión. Y, por esta vía, aísla el objeto a, lo sitúa a la mayor distancia posible del I, que el analista es llamado por el sujeto a encarnar. El analista debe abandonar esa idealización para servir de soporte al objeto a separador, en la medida en que su deseo le permite, mediante una hipnosis a la inversa, encarnar al hipnotizado.10 

Servir de soporte, hacer semblante del objeto a, no da ninguna ilusión de ganancia de ser, en tanto “el analista, yo lo des-soy: el objeto a no tiene ser”11. 

Identificación con el síntoma: una consecuencia lógica 

Varios años después, en su texto El atolondradicho, Lacan vuelve a ubicar en el fin del análisis un duelo: 

&El analizante sólo termina [su análisis] si hace del objeto a el representante de la representación de su analista. Entonces, en tanto dure su duelo del objeto a al que por fin lo ha reducido, el psicoanalista persiste en causar su deseo: más bien maníacodepresivamente. […] Luego, el duelo se consuma.12nbsp;

8. Lacan, El seminario. Libro 8. La transferencia, 50.

9. Jacques Lacan, El seminario. Libro 11. Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis (Buenos Aires: Paidós, 2001), 276.

10. Ibíd., 281.

11. Jacques Lacan, “Clase del 9 de abril de 1974”, en Seminario 21. Los noincautos yerran o Los nombres del padre (1973-1974), trad. efba. Inédito.

12. Jacques Lacan, “El atolondrado, el atolondradicho o de las vueltas dichas”, en Escansión 1 (Buenos Aires: Paidós, 1984), 60. 

En este punto cobra sentido lo que señalé en el apartado anterior, al entender el “del” del duelo del analista como genitivo objetivo-subjetivo, en este caso, resaltando el duelo que se le hace al analista, al ser reducido a objeto a. 

Posteriormente, en el seminario El fracaso del Un-desliz es el amor, Lacan se pregunta con qué se identifica aquel que ha terminado su análisis, a lo cual responde que está en juego la identificación con el síntoma: 

¿Con qué se identifica uno pues al final del análisis? (pasa las páginas de sus notas) ¿Se identificaría uno con su inconsciente? Eso es lo que yo no creo. Yo no lo creo porque el inconsciente sigue siendo, digo sigue siendo, no digo sigue siendo eternamente porque no hay ninguna eternidad, sigue siendo el Otro. Es del Otro con A mayúscula [Autre] de lo que se trata en el inconsciente, no veo que se le pueda dar un sentido al inconsciente si no es el de situarlo en este Otro portador de significantes que mueve los hilos de lo que llamamos imprudentemente, imprudentemente porque es… (Suspira) Es ahí donde se alza la cuestión de lo que el sujeto es a partir del momento en que depende tan completamente del Otro. ¿En qué consiste entonces esa localización que es el análisis? ¿Sería o no sería eso identificarse, identificarse con su síntoma? He avanzado que el síntoma puede ser, es acuñable, es corriente, puede ser el compañero sexual. Está… está en la línea de lo que he proferido, proferido sin que ello les hiciera gritar como descosidos, es un hecho, he proferido que, que el síntoma tomado en este sentido es, para emplear el término “conocer”, es lo que se conoce, es incluso lo que, lo que se conoce mejor sin que eso llegue demasiado lejos. […] ¿Entonces qué quiere decir conocer? Conocer quiere decir savoir faire con ese síntoma, saber desenmarañarlo, saber manipularlo, saber, esto tiene algo que corresponde a lo que el hombre hace con su imagen […] es imaginar la manera en que uno se (tose) desenvuelve con este síntoma. Se trata aquí desde luego del narcisismo secundario, el narcisismo radical, estando el narcisismo al que llamamos primario excluido en este caso. Savoir faire ahí con el propio síntoma, ¡ese es el fin del análisis, hay que reconocer que es corto! Eso no llega realmente muy lejos.13 

¿Por qué Lacan se pregunta con qué se identifica aquel que ha terminado su análisis? Si hablamos de “cierto duelo” que implica el deseo del analista y su función, ¿por qué no hablar de una cierta identificación? 

Es en este punto donde considero que Freud nos da la llave para pensar la relación entre identificación y duelo. En “Duelo y melancolía” nos dice que en la melancolía se “Establece una identificación del yo con el objeto resignado”14, a la que él llama “identificación narcisista”15, la cual “[…] corresponde a la regresión desde un tipo de elección de objeto al narcisismo originario”16. Hasta este momento, Freud no acerca la identificación al duelo. 

13. Jacques Lacan, El fracaso del Un-desliz es el amor: A la manera del seminario oral de Jacques Lacan (1976-1977) (México: Artefactos, 2008), 20-21.

14. Freud, “Duelo y melancolía”, 246.

15. Ibíd., 247.

16. Ibíd. 

Posteriormente, en “Psicología de las masas y análisis del yo”, Freud nos presenta diversos tipos de identificación: identificación primaria, identificación con un rasgo e identificación en donde se prescinde por completo de la relación de objeto. A propósito de la identificación con un rasgo afirma: 

Dijimos que la identificación es la forma primitiva, y la más originaria, del lazo afectivo; bajo las constelaciones de la formación de síntoma, vale decir, de la represión y el predominio de los mecanismos del inconsciente, sucede a menudo que la elección de objeto vuelva a la identificación, o sea, que el yo tome sobre sí las propiedades del objeto. Es digno notarse que en estas identificaciones el yo copia {Kopieren} en un caso a la persona no amada, y en el otro a la persona amada. Y tampoco puede dejar de llamarnos la atención que, en los dos, la identificación es parcial, limitada en grado sumo, pues toma prestado un único rasgo de la persona objeto.17 

Será en “El yo y el ello” en donde considero que Freud acerca la identificación al duelo al decir que “en los rasgos de carácter de mujeres que han tenido muchas experiencias amorosas, uno cree poder pesquisar fácilmente los saldos de sus investiduras de objetos”18.En esta caso, podemos pensar que se ha producido una identificación al rasgo. 

Propongo que esto no solo se presenta en las mujeres, mucho menos en solo aquellas que han tenido “muchas experiencias amorosas”, sino en todo sujeto que ha atravesado un duelo, teniendo en cuenta que en todo duelo se duela un objeto de amor. Podríamos arriesgar la fórmula: “Dime a quiénes has amado y te diré quién eres”. Un duelo no deja de tener consecuencias para un sujeto: tiene un estatuto de acto. 

En el duelo del analista, se trataría entonces de la identificación con el síntoma, a lo irreductible en el análisis: “No hay ninguna reducción radical del cuarto término [el síntoma], ni siquiera en el análisis, puesto que Freud enunció, no se sabe por qué vía, que hay una Urverdrängung, una represión que nunca se anula”19. Identificación con lo incurable, con “[…] lo que hay de singular en cada individuo” 20, con el modo en que cada sujeto logra saber hacer con la no relación sexual. 

17. Sigmund Freud, “Psicología de las masas y análisis del yo” (1921), en Obras completas, vol. xviii (Buenos Aires: Amorrortu, 2001), 101.

18. Sigmund Freud, “El yo y el ello” (1923), en Obras completas, vol. xix (Buenos Aires: Amorrortu, 2001), 31.

19. Jacques Lacan, El seminario. Libro 23. El sinthome (Buenos Aires: Paidós, 2006), 43. 20. Ibíd., 165. 


Bibliografía 

Freud, Sigmund. “Duelo y melancolía” (1915). En Obras completas, vol. xiv. Buenos Aires: Amorrortu, 2001. 

Freud, Sigmund. “Psicología de las masas y análisis del yo” (1921). En Obras completas, vol. xviii. Buenos Aires: Amorrortu, 2001. 

Freud, Sigmund. “El yo y el ello” (1923). En Obras completas, vol. xix. Buenos Aires: Amorrortu, 2001. 

Lacan, Jacques. “El atolondrado, el atolondradicho o de las vueltas dichas”. En Escansión 1. Buenos Aires: Paidós, 1984. 

Lacan, Jacques. El fracaso del Un-desliz es el amor: A la manera del seminario oral de Jacques Lacan (1976-1977). México: Artefactos, 2008. 

Lacan, Jacques. Seminario 21. Los no-incautos yerran o Los nombres del padre (1973-1974). Traducción de efba. Inédito. 

Lacan, Jacques. El seminario. Libro 8. La transferencia. Buenos Aires: Paidós, 2004. 

Lacan, Jacques. El seminario. Libro 10. La angustia. Buenos Aires: Paidós, 2006. 

Lacan, Jacques. El seminario. Libro 11. Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis. Buenos Aires: Paidós, 2001. 

Lacan, Jacques. El seminario. Libro 23. El sinthome. Buenos Aires: Paidós, 2006. 

Referencias

Freud, Sigmund. “El yo y el ello” (1923). En Obras completas, vol. xix. Buenos Aires: Amorrortu, 2001.

Lacan, Jacques. “El atolondrado, el atolondradicho o de las vueltas dichas”. En Escansión 1. Buenos Aires: Paidós, 1984.

Lacan, Jacques. El fracaso del Un-desliz es el amor: A la manera del seminario oral de Jacques Lacan (1976-1977). México: Artefactos,

Lacan, Jacques. Seminario 21. Los no-incautos yerran o Los nombres del padre (1973-1974). Traducción de efba. Inédito.

Lacan, Jacques. El seminario. Libro 8. La transferencia. Buenos Aires: Paidós, 2004.

Lacan, Jacques. El seminario. Libro 10. La angustia. Buenos Aires: Paidós, 2006.

Lacan, Jacques. El seminario. Libro 11. Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis. Buenos Aires: Paidós, 2001.

Lacan, Jacques. El seminario. Libro 23. El sinthome. Buenos Aires: Paidós, 2006.

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Vargas Castro, D. A. (2011). Duelo del analista e identificación con el síntoma. Desde el Jardín de Freud, (11), 221–228. https://revistas.unal.edu.co/index.php/jardin/article/view/27255

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[1]
Vargas Castro, D.A. 2011. Duelo del analista e identificación con el síntoma. Desde el Jardín de Freud. 11 (ene. 2011), 221–228.

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Vargas Castro, D. A. Duelo del analista e identificación con el síntoma. Desde jard. Freud 2011, 221-228.

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VARGAS CASTRO, D. A. Duelo del analista e identificación con el síntoma. Desde el Jardín de Freud, [S. l.], n. 11, p. 221–228, 2011. Disponível em: https://revistas.unal.edu.co/index.php/jardin/article/view/27255. Acesso em: 18 abr. 2024.

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Vargas Castro, David Andrés. 2011. «Duelo del analista e identificación con el síntoma». Desde El Jardín De Freud, n.º 11 (enero):221-28. https://revistas.unal.edu.co/index.php/jardin/article/view/27255.

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Vargas Castro, D. A. (2011) «Duelo del analista e identificación con el síntoma», Desde el Jardín de Freud, (11), pp. 221–228. Disponible en: https://revistas.unal.edu.co/index.php/jardin/article/view/27255 (Accedido: 18 abril 2024).

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D. A. Vargas Castro, «Duelo del analista e identificación con el síntoma», Desde jard. Freud, n.º 11, pp. 221–228, ene. 2011.

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Vargas Castro, David Andrés. «Duelo del analista e identificación con el síntoma». Desde el Jardín de Freud, no. 11 (enero 1, 2011): 221–228. Accedido abril 18, 2024. https://revistas.unal.edu.co/index.php/jardin/article/view/27255.

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Vargas Castro DA. Duelo del analista e identificación con el síntoma. Desde jard. Freud [Internet]. 1 de enero de 2011 [citado 18 de abril de 2024];(11):221-8. Disponible en: https://revistas.unal.edu.co/index.php/jardin/article/view/27255

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