Contribución al Estudio de las Moscas Anastrephas en Colombia.

1. Colombia tiene amplias posibilidades de desarrollar una industria frutícola floreciente dadas las excepcionales condiciones de ubicación geográfica, diversidad de climas y de suelos. 2. La deficiente producción frutera actual es el resultado de una reunión de factores adversos, entre los que resalta el desconocimiento de los problemas científicos que afectan a dicha industria. En este aspecto, los problemas fitosanitarios, abandonados y faltos de investigación, ocupan lugar preponderante. 3. Las moscas Anastrephas constituyen la plaga más importante de la fruticultura nacional, y por esta razón, un estudio sobre estos insectos es un tema de importancia. 4. Las principales "moscas de las frutas" pertenecen dentro de la familia Trypetidae, a los géneros: Dacus, Rhaglethis, Ceratitis, Dactrocera y Anastrepha. 5. Los nombres comunes con que se conocen las moscas Anastrephas varían de un país a otro y se relacionan particularmente con el lugar de origen de las distintas especies o la fruta determinada como preterida por la mosca en una localidad. En Colombia la denominación vernácula más difundida es la de "gusano de las frutas". También se nombra el insecto como "mosca o gusano del mango" o "gusano de la guayaba". 6. Los nombres científicos de las moscas distinguen a una, gran cantidad de especies. En Colombia, varios autores han reportado la existencia de las especies A.fraterculus, A. ludens, A. mombinpracoptans, A. pikeli y A. serpentina. Todas estas especies inciden en las regiones colombianas comprendidas entre 0 y 2000 metros de altura, es decir, en casi todas las regiones agrícolas importantes (frutales, café, cacao) de temperaturas entre 14° y 30° C. 7. Las moscas Anastrephas están confinadas casi exclusivamente al continente americano entre las latitudes 27° N. y 35° S. Particularmente, la especie A. fraterculus, una de las más difundidas en Colombia, fué determinada por Wiedemann (1830) como oriunda del Brasil, es decir una especie enteramente tropical. 8. Dentro de los dípteros, las moscas del género Anastrepha se pueden clasificar como suborden Cyclorrapha, serie Schyzophora, sección Myodaria, subsección Acalyptratae, familia Trypetidae. 9. Las moscas Anastrephas cumplen su ciclo biológico al través de 4 estados metamorfósicos que ocurren así: imago en el ambiente aéreo, huevo y larva en la fruta y pupa en el suelo. En cada uno de los estados metamorfósicos, el insecto exhibe las características comunes de los dípteros. 10. Los huevos miden l , mm.; son de forma ovalada y ápices un tanto agudos, de color blancuzco ligeramente cremoso. La incubación demora de 4 a 7 días; el número de huevos por postura es de 3 y hasta l. La incubación de los huevos y la vida de la larva recién nacida son afectados por temperatura, humedad y determinados factores resultantes de la condición de madurez de la fruta. 11. Las larvas son vermiformes, puntiagudas en la cabeza, de color amarillo crema claro en tonalidades diversas hasta blanquecino o cremoso. No poseen patas; no tienen ojos ni antenas. Su tamaño y la duración del período larvario varían con la temperatura, la humedad, y diversas condiciones de la fruta en cuanto a cantidad de material parásito, acidez, estado de madurez, etc. El número de larvas puede ser de 1 a 3 por fruta y hasta cifras muy elevadas como 72, según la población de moscas y la clase de fruta. Las larvas adquieren su desarrollo completo entre tres estadios y dos "écdicis". 12. Las pupas son ovaladas como una barrilito; miden de 3 a 7 mm, de largo x 1 1⁄2 a 21⁄2 de ancho. Son de color castaño claro en tonalidades hasta el tabaco oscuro. La duración del período de pupa, así como diferentes hechos relacionados con el estado, sufren variaciones debidas a temperatura, humedad, acidez, soltura y textura del suelo, que es el medio donde normalmente ocurre el empupamiento. 13. El estado perfecto del insecto o imago posee características bien definidas que permiten diferenciarlo de otros insectos con facilidad. Miden de 10 a 15 mm, con las alas extendidas y 6 a 9 mm, de largo sin contar el vigoroso ovipositor que ostenta el insecto hembra. Las moscas son de color vistoso, ligeramente amarillo hacia parcia oscuro. Las notas sobresalientes son las manchas alares de color humo que se hallan dispuestas en forma de barra, de S inclinada y de V invertida; las cerdas y pelos del cuerpo (tórax y base de la cabeza); los ojos grandes de color verde brillante; los tres ocelos sobre fondo oscuro; la frente amplia, la probaseis bien desarrollada; las tres líneas sobre el tórax de color amarillo sobre fondo rubio, en sentido longitudinal; el abdomen en forma de pera y el ovipositor en las hembras. 14. El insecto exhibe gran facilidad de reproducción a Juzgar por el volumen máximo de oviposición (hasta 800 huevos) y la relación macho -hembra (1 : 2) 15. Las distintas especies del insecto se pueden diferenciar entre sí por la disposición y características de las manchas alares, los manchas toráxicas, la forma y el tamaño del ovipositor, y algunos detalles del abdomen. 16. La especie A. fraterculus ha sido encontrada en 40 frutos distintos en el país, en su gran mayoría de importancia económica. 17. Las preferencias selectivas que el insecto exhibe para alimentación y oviposición son fenómenos de vigencia local regidos por diversos factores ambientales y condiciones propias de los distintos frutos parasitados. 18. Las Anastrephts son parásitos específicos del fruto. Sus daños son muy importantes en la generalidad de los frutos atacados (carnosos y jugosos) porque destruyen la parte comestible o comercial de éstos, inutilizándolos totalmente para el consumo humano. 19. Los daños del insecto se pueden diferenciar de otros daños producidos por insectos parásitos de los frutos, aparte de sus características especiales en el estado dañino (larva) o en el estado perfecto (mosca), por estos simples detalles: a) Los huevos y las larvas se encuentran dentro del fruto parasitado. b) Los frutos parasitados no presentan orificios de entrada de las larvas. c) Los frutos no se deforman, ni sufren daño alguno en su semilla. 20. La influencia de los distintos factores que, actúan sobre la vida del insecto a través de los distintos estados de su ciclo, pueden resumirse así: a) Los niveles intermedios de humedad y temperatura son óptimos para la vida y desarrollo del insecto. b) Los niveles fuertes de acidez son limitantes para la vida del huevo, la larva y la pupa. c) La textura del suelo en asocio de la humedad determina la profundidad del empupamiento y la rapidez con que se efectúa el proceso. 21. Para controlar el insecto es preciso recurrir a la combinación de diversas prácticas de control artificial, cultural y biológico asesoradas por inteligente legislación al respecto. En forma aislada, cualquiera de los sistemas de control conocidos, parece inefectivo y puede rendir escasos beneficios. Esto se debe al carácter mismo de la plaga, particularmente en cuanto se refiere a su amplitud poligráfica, hábitos, y ocurrencia nacional. 22. Entre las prácticas de control artificial, el uso de insecticidas moderno, parece la más efectiva si bien, encierra algunos peligros, sobre todo en cuanto a la conservación de los recursos biológicos y el equilibrio faunístico de la población entomológica. Los experimentos conducidos revelan que los siguientes insecticidas : Chlordano al ½%, DDT al ½%" Metoxychlor al 0,01 %, Toxapheno al ½% , Aldrin al 0,0002%, Dieldrin al 0,0003%, y Pyrenone (Butóxido de piperonil y piretrinas) al 0,25 % son altamente tóxicos para las moscas aplicados en forma de aspersión sobre el vegetal o adicionados al suelo en el momento del empupamiento, para impedir la formación de la pupa y la emersión normal de las moscas. 23. En cuanto a defensa cuarentenaria, la refrigeración de las frutas a temperaturas letales para la mosca y la esterilización de los mismos en atmósfera de vapor saturado, son medidas de importancia y recomendables. 24. En las prácticas de control cultural, es de suma importancia el manejo de los frutos, labor que puede ser: a) Embolsado de los frutos, cuando se trate de huertos pequeños, de frutos valiosos, y vegetales que permitan el fácil acceso a aquéllos. b) Destrucción de los frutos atacados en regiones sin parásitos de la mosca, enterrándolos a profundidades convenientes. c) Recolección y almacenamiento de los frutos atacados, en pozos provistos de tapas especiales, cuando se trate el problema en regiones con parásitos de la mosca. 25. La picada superficial del suelo debajo Je los frutales y un riego corto hasta saturación del suelo en la época del empupamiento, son labores culturales que pueden ayudar a la labor de los parásitos y a la destrucción de muchas pupas por la acción de los factores ambientales (luz, calor, exposición a la sequía, etc.). 26. Las plantas hospedadoras silvestres pueden utilizarse como planta-trampas recolectando los frutos atacados oportunamente y almacenándolos en pozos provistos con tapa, a fin de favorecer la multiplicación de los parásitos de la mosca. En caso contrario, la destrucción de tales plantas hospedadoras silvestres, es lo más aconsejable. 27. Colombia cuenta con ignorados recursos biológicos para el control de las Anastrephas. Se ha logrado aislar algunos parásitos de larvas procedentes de varias frutas, entre los cuales se han identificado Ganaspis carvalhoi Dett., y otras especies relacionadas posiblemente; Diachasma (O.) crawfordi Vier., Odontosema anastrephae Borgm., Heteropilus,spp., posiblemente; Opius trinidadensis Gah., O. crawfordi Vier. Además se ha comprobado el parasitismo de la Sphalangia pilippinensis sobre las pupas de las Anastrephas. En otros países afectados se conocen numerosas especies parásitas de importancia. 28. El Estado es la entidad llamada a organizar una campaña de control de las Anastrephas, luego de concienzudos estudios sobre los recursos biológicos de parásitos y predatores, y de las posibles introducciones de especies foráneas de la misma índole. Es el Estado igualmente, la única entidad capaz de aunar esfuerzos y recursos para lograr una labor realmente efectiva en el control de esta terrible plaga de la fruticultura colombiana.