Cortina, Adela. Aporofobia, el rechazo al pobre. Un desafío para la democracia. Barcelona: Paidós, 2017. 200 pp.
Se suele decir que las palabras crean realidades. Sin embargo, en su nuevo libro, la filósofa Adela Cortina revierte el sentido de esta sentencia para afirmar que existen realidades tan patentes que exigen ser nombradas, pues sin un nombre corremos el riesgo de hacer invisible el hecho, con las funestas consecuencias que se derivan de ello, al no poder incorporar aquella realidad en la conciencia, el diálogo y la reflexión. Nos referimos al término "aporofobia", un neologismo acuñado en 1995 por Adela Cortina en una publicación del ABC Cultural de España, y que proponía para designar aquel rechazo, aversión, temor y desprecio que se dirige al pobre, al desamparado, al que supuestamente no puede devolver nada a cambio en un mundo construido sobre el contrato económico.
En este sentido, Aporofobia, el rechazo al pobre. Un desafío para la democracia es un libro valiente, pues se arriesga a decir, desde la filosofía, lo que pocos osan nombrar en otros ámbitos. Valiente, porque, desde el pensamiento ético y moral, Cortina decide levantar la alfombra no solo para poner en evidencia el descuido que se aglomera, sino también para sugerir los medios que nuestras sociedades deben implementar para incluir a los pobres de una vez por to das en el desarrollo social y económico, pues la dignidad de toda persona lo exige como un mínimo de justicia. El libro también es valiente, porque Cortina abre una brecha al mostrar una patología social que, además de ser nombrada, necesita ser prontamente estudiada por otras áreas del saber: desde el punto de vista de las ciencias económicas, las ciencias del derecho, la sociología, la psicología, las neurociencias, etc. Cuando eso suceda, será el momento para que el término "aporofobia" se convierta en una expresión que designe un objeto de estudio específico, y se traslade por fin al uso habitual y común de nuestra cotidianeidad. Felizmente el primer paso para disponer de esta realidad ya lo ha dado la RAE al incorporar recientemente este neologismo en la actual edición del diccionario de la lengua española (2018). La certeza que deja entrever la autora es que, en la medida que la aporofobia sea una realidad reconocida y dialogada, será el momento para que el "tratamiento" pueda tener los efectos que esperamos.
Se puede afirmar que este libro no constituye un paréntesis en la obra de Adela Cortina. Es posible encontrar un hilo conductor diáfano entre Ética mínima (1986), Ética aplicada y democracia radical (1993), Ciudadanos del mundo. Hacia una teoría de la ciudadanía (1997), Ética de la razón cordial (2007), Justicia Cordial (2010), Neuroética y neuropolítica: sugerencias para la educación moral (2011), por nombrar solo algunos libros de su prolífica producción intelectual. Este hilo conductor comienza en los albores de una filosofía moral normativa, que inaugura la necesidad de construir dialó gicamente ciertos mínimos éticos que se erigen como el horizonte ético exigible a las sociedades democráticas y pluralistas.
Al mismo tiempo, este horizonte normativo se va animando por la interpelación de una razón cordial que nos llama a pensar éticamente en medio de la situación, cuando no solo es clave la claridad racional de la actividad dialógica, sino también las emociones y los sentimientos que nos ponen en contacto con la tonalidad de la vida hecha experiencia. En este sentido, dar visibilidad al áporos no es solamente un acto de restitución categorial en pos de la superación de su condición objetivamente injusta, sino también el llamado a mirar el rostro de la persona concreta que padece la pobreza, para descubrir que esta no constituye su identidad, sino únicamente una cualidad negativa que resulta de nuestra propia patología política, social y económica.
Dentro de estas coordenadas transcurre el libro sobre aporofobia, haciendo dialogar a los clásicos de la filosofía práctica, confrontados con una ingente bibliografía actualizada. El texto parte mostrando el origen del término y las motivaciones intelectuales que llevaron a la autora a acuñar la palabra. Continúa después analizando los delitos y los discursos del odio dirigidos al pobre, tan abundantemente informados en los medios de comunicación y en las últimas campañas políticas en diferentes países; signos claros de una aporofobia endémica. Cortina sugiere en el entre tanto, siempre con un tono crítico, que esta aversión al pobre se podría explicar por ciertos componentes cerebrales, biológicos y evolutivos, que podrían ser intervenidos desde la ciencia para una biomejora moral. Adela Cortina considera y sopesa estos antecedentes de predisposición biológica; sin embargo, se desmarca de esta perspectiva continuista, para insertar la discontinuidad de una racionalidad moral que es capaz de obligarse a cumplir con el respeto de todos los seres humanos, en sí mismos valiosos por ser libres. El texto concluye con la convicción de que la pobreza y la desigualdad son males evitables, y que la hospitalidad al extranjero pobre y refugiado es un signo de progreso cultural y de civilización que nos ubica a una altura verdaderamente humana, en cuanto que justa y compasiva.
Bibliografía
- Cortina, A. Ética Mínima: introducción a la filosofía práctica. Madrid: Tecnos, 1986. 🠔
- Cortina, A. Ética aplicada y democracia radical. Madrid: Tecnos , 1993. 🠔
- Cortina, A. Ciudadanos del mundo: hacia una teoría de la ciudadanía. Madrid: Alianza, 1997. 🠔
- Cortina, A. Ética de la razón cordial: educar en la ciudadanía en el siglo XIX. Oviedo: Nobel, 2007. 🠔
- Cortina, A. Justicia cordial. Madrid: Trotta, 2010. 🠔
- Cortina, A. Neuroética y Neuropolítica: sugerencias para la educación moral. Madrid: Tecnos , 2011. 🠔