El pasado 9 de octubre de 2024 tuve la oportunidad de reunirme con varios editores de revistas nacionales e internacionales en el marco del primer encuentro de revistas científicas/humanistas, el cual se llevó a cabo en la ciudad más septentrional de Colombia continental y de Suramérica: Riohacha. El evento fue muy bien organizado por la profesora Emilce Sánchez, editora de la revista Entretextos y un grupo profesoral de la Universidad de la Guajira de una calidad humana abrumadora, para la cual les presento mi más profundo agradecimiento.

Dentro de los asistentes a este valioso evento aparecieron figuras influyentes en el tema editorial como el profesor José Alonso, coordinador general de Latindex (México) y el profesor Carlos Agudelo, codirector de SciELO (Colombia), además de otros extranjeros claves, de forma presencial y de forma virtual.

Este “primer encuentro” no sólo fue sobre revistas, para quien escribe, también fue el primer encuentro con otros editores, pues soy neófito en el asunto editorial toda vez que acabo de asumir el cargo de editor para la revista Boletín de Ciencias de la Tierra. En esta primera reunión tuve la suerte de compartir historias y experiencias profesionales con docentes quienes son a su vez editores como Mauricio Hernández de la Universidad de la Salle, Héctor Flórez de la Universidad Distrital, Tatiana Gómez del Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras (Santa Marta) e Iris Jiménez de la Universidad de la Guajira, a quienes expreso mi gratitud y ofrezco mi futura amistad.

Fueron 3 días de exposiciones, todas interesantes y con variadas aristas por explorar, pues para alguien quien está incursionando en el mundo de la gestión editorial, cada oración y aporte de los conocedores del asunto representó un gran tesoro, no sólo por la cualificación de sus presentaciones sino también por la calidad humana allí mostrada, lejos de los egos académicos que tanto abundan dentro de las universidades y que ínfimo aporte hace para el avance de una ciencia más democrática. Además de intentar conservar la información adquirida en el disco duro de mi cerebro, los consejos de las personas que conforman este gremio fueron, en demasía, provechosos para mí. Como parte de los temas tratados en el encuentro se destacaron: la divulgación científica en Colombia; ciencia abierta; medición de las publicaciones de revistas científicas y programas académicos; futuro de las revistas científicas; gestión editorial en revistas científicas Latinoamericanas; uso del Open Journal System (OJS); retos, riesgos y oportunidades de la inteligencia artificial y la digitalización de las revistas, entre otros más.

Ojalá en el futuro cercano se vuelva a presentar un espacio de discusión para editores, y que esta ardua labor que hicieron los profesores de la Universidad de la Guajira no se quede en el limbo de las buenas acciones, y sea esta la oportunidad para hacer la invitación a todos los editores de las revistas nacionales y latinoamericanas para que nos reunamos en un “segundo encuentro” y fortalecer esta idea que nació en Colombia boreal y nos dé igualmente un norte a quienes editamos revistas científicas y humanistas.