Publicado

2016-07-01

Territorio y ambiente: Prioridad en los acuerdos de paz

Autores/as

  • Nohra León Rodríguez Universidad Nacional

En el presente artículo se exploran algunos datos asociados a la problemática rural. Varias son las dimensiones que podemos resaltar de esta problemática, entre ellas, la seguridad alimentaria, la huella ecológica, el empleo en las áreas rurales, y la conservación de áreas estratégicas. Además, hay que concebir la problemática rural y ambiental en el marco las transformaciones territoriales, respecto de los instrumentos económicos y los incentivos sectoriales, los sistemas productivos y las relaciones urbano-rurales, entre otros. En el texto se sugiere que en la actualidad se dispone de una gran cantidad de conocimientos e investigaciones realizadas para poder dar respuesta a los retos que traiga el posconflicto, lo importante es consolidar una política de Estado capaz de articular múltiples saberes y esfuerzos.

10_Bit26-2_A

Territorio y ambiente:

Prioridad en los acuerdos de paz1

Territory and Environment:

Priority in the peace agreements

Território e Ambiente:

Prioridade em acordos de paz

Nohra León-Rodríguez

Universidad Nacional de Colombia

Correo electrónico: nleonr@unal.edu.co

Resumen

En el presente artículo se exploran algunos datos asociados a la problemática rural. Varias son las dimensiones que podemos resaltar de esta problemática, entre ellas, la seguridad alimentaria, la huella ecológica, el empleo en las áreas rurales, y la conservación de áreas estratégicas. Además, hay que concebir la problemática rural y ambiental en el marco las transformaciones territoriales, respecto de los instrumentos económicos y los incentivos sectoriales, los sistemas productivos y las relaciones urbano-rurales, entre otros. En el texto se sugiere que en la actualidad se dispone de una gran cantidad de conocimientos e investigaciones realizadas para poder dar respuesta a los retos que traiga el posconflicto, lo importante es consolidar una política de Estado capaz de articular múltiples saberes y esfuerzos.

Palabras Clave: Acuerdos de Paz, Propiedad de la Tierra, Sector Agropecuario, Ambiente.

Abstract

In this article, are explored some data associated with rural issues. There are several dimensions that can highlight of this problem, including food security, ecological footprint, employment in rural areas and the conservation of strategic areas. In addition, we must conceive of rural and environmental problems under territorial changes, regarding economic instruments and sectoral incentives, production systems and urban-rural relations, among others. The text suggests that at present we has a lot of knowledge and research to be able to respond to the challenges of the post-conflict, it is important to consolidate a state policy capable of articulating multiple knowledge and efforts.


Keywords:
Peace Accords, Land Ownership, Agricultural Sector, Environment.

Resumo

Neste artigo alguns dados associados com questões rurais são explorados. Há várias dimensões que podem destacar deste problema, incluindo a segurança alimentar, pegada ecológica, o emprego nas zonas rurais e a conservação de áreas estratégicas. Além disso, temos de conceber problemas rurais e ambientais sob as mudanças territoriais, relativas a instrumentos económicos e incentivos setoriais, sistemas de produção e as relações urbano- rurais, entre outros. O texto sugere que, actualmente, tem um monte de conhecimento e pesquisa para ser capaz de responder aos desafios de trazer o pós-conflito, é importante para consolidar uma política de Estado capaz de articular o conhecimento múltiplo e esforços.



Palavras Chave:
Acordos de Paz, propriedade da terra, setor agrícola, Ambiente.

Nohra León-Rodríguez

Profesora asociada a la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Nacional de Colombia. PhD en Ciencias Económicas. Actualmente se desempeña como Vicedecana Académica de la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Nacional de Colombia, Sede Bogotá.

nleonr@unal.edu.co

El agro colombiano un contexto de obligada mirada

La aproximación a las consideraciones del territorio y del ambiente como un prerrequisito para los acuerdos de paz en Colombia conducen a una revisión general del comportamiento sectorial en las últimas décadas, la cual, da cuenta de sus dinámicas. Siguiendo la información de la Tabla 1, la contribución de la agricultura colombiana al PIB descendió del 16.7% en 1990 al 8.9% en el año 2000, y continuó cayendo a un ritmo más moderado durante la década siguiente, hasta situarse en 6.1% en el año 2013.

Tabla 1. La agricultura en la economía colombiana 1990-2013

Agricultura en el PIB ( % )

1990

16.7

2013

6.1

Peso de la agricultura en el empleo (%)

26.0

16.9

Exportaciones agroalimentarias (%)

37.6

11.4

Importaciones agroalimentarias (%)

7.6

10.6

Características del sector agrícola

Balanza comercial agroalimentaria (USD miles de millones)

2.4

0.5

Cultivo en la producción agrícola total (%)

62

59

Ganadería en la producción agrícola total (%)

38

41

Superficie agrícola (millones Has)

45

43

Peso de las tierras arables en la superficie agrícola (%)

7

4.0

Peso de la agricultura en el consumo del agua

n.d

60

Fuente: DANE (2014).

Así mismo, la contribución del sector al empleo también experimentó un descenso del 26% en 1990 y al 17.5% en el año 2013. Si estas cifras se comparan con las de los años 50 del siglo XX cuando la agricultura representaba aproximadamente el 55% del empleo total, este descenso ha sido considerable (Ministerio del Trabajo, 2016).

Como se puede concluir de este comportamiento, el sector agropecuario ha perdido relevancia durante la última década en el contexto macroeconómico, impactando, no sólo su contribución al empleo, sino a la producción de alimentos e insumos fundamentales para la agroindustria y la industria, y a las diferentes dinámicas socioeconómicas características del territorio.

La Tabla 2 permite ver que la pequeña propiedad (definida por el PNUD (2011) como una propiedad de menos de 50 hectáreas), que para el año 1984 ocupaba cerca del 31.1% del territorio nacional y estaba en manos de 92.3% de los propietarios, para el año 2009 representaba el 33,03% del total y estaba en manos del 87,26% de los propietarios, mientras que los medianos propietarios perdieron participación al reducir de 45.6% a 38.45% su participación, a diferencia de la gran propiedad que se expandió del 23.3% en 1984 al 28.52% en 2009. Esto evidencia una concentración de la propiedad de la tierra en detrimento de mediano y el pequeño propietario, quienes han perdido peso dentro de la propiedad rural. Adicionalmente, se debe mencionar la informalidad en los derechos sobre la tenencia de la tierra que se presentan en diferentes áreas del país, unido a los procesos de desplazamiento, despojo, abandono y usurpación de las tierras por causas violentas que se han dado en las últimas décadas y que dificultan enormemente tener certezas sobre la situación jurídica de grandes extensiones de tierra en las zonas rurales.

Tabla 2. La propiedad de la tierra en Colombia, 1984-2009

Rango

GINI
Tierras

Área 1984

Propietarios

Área 2009

Predios

Propietarios

Ha

%

No

%

Ha

%

No.

%

No.

%

Pequeña <50ha

0,61

7198.7

31.11

1460.7

92.3

12.687.945

33,00

2.360.488

94,70

3.147.189

87,26

Mediana <500ha

0,21

10144.6

45.6

115.6

7.3

14.770.086

38,45

123.997

4,97

402.902

11,17

Grande >500ha

0,30

5189.7

23.3

6.7

0.4

10.957.770

28,52

8.230

0,33

56.542

1,57

Total General

0,86

22.233

100

1.583.0

100

38.415.801

100

2.492.715

100

3.606.633

100

Fuente: MADS-Universidad Nacional de Colombia-IDEA, 2013; León N., MESA, C. y ISAZA, 2012. & Llorente, Salazar y Gallo, 1985.

De otro lado, en Colombia se viene dando un proceso de relatifundización, dinámica que se profundizó desde finales de siglo XX y comienzos del XXI. La presencia de la economía del narcotráfico, del paramilitarismo, de las diferentes violencias unidas al desplazamiento han marcado y reorientado las formas de concentración de la propiedad y, en general, de la propiedad rural. El desplazamiento forzado y los desplazados ambientales dan cuenta de los conflictos por los cambios en el uso del suelo, de los impactos y pasivos ambientales derivados del modelo de desarrollo extractivista al que le apostó el país, y de las profundas transformaciones del territorio.

En los últimos años, Colombia se viene insertando en los mercados globales a través de las exportaciones procedentes del sector primario, particularmente, del sector de los hidrocarburos y la minería. El siglo XXI comienza con una alta contribución de este sector al PIB nacional, tendencia que se presenta con mayor énfasis hacia finales de la década de 2000. En gran medida, eso obedece, de un lado, al comportamiento de la demanda internacional por este tipo de recursos naturales y, por otro, a una política económica nacional que identificó en ellos una oportunidad para su desarrollo, sin dimensionar el alcance de los pasivos ambientales que se derivarían de la implementación de un Plan Nacional de Desarrollo soportado exclusivamente en la Locomotora minera (León, 2012).

El territorio colombiano ha visto evolucionar la producción agrícola. Con la sustitución rápida hacia los cultivos comerciales, que se van perfilando como la posibilidad de inserción en los mercados internacionales pareciera el sector agrícola tener un futuro próspero, pero precisamente son dichos cultivos comerciales los que sufren el impacto de las medidas neoliberales que propugnan por unos mayores niveles de productividad. Las economías campesinas resultan fuertemente impactadas, no solamente por las medidas de apertura económica, sino, por la ausencia de mecanismos de protección y de apoyos institucionales y por los altos costos de transacción que, en conjunto, ubican al sector rural colombiano en serias desventajas para competir con los productos importados (procedentes, especialmente, de países altamente desarrollados) con enormes subsidios y barreras proteccionistas.

Como se puede observar en la gráfica 1, en los últimos años se evidencia un incremento de las importaciones agroalimentarias sin precedentes en la historia del país, coincidiendo con un período donde el sector minero-energético tuvo mayor participación en el PIB total de la economía. Lo anterior, se expresa en los cambios en el uso del suelo, afectando la seguridad alimentaria de algunas áreas que entran a depender de otras economías campesinas, pero con serias externalidades negativas que han quedado en los territorios y en las comunidades.

Gráfica 1. Comercio agroalimentario de Colombia: 1991-2013

Fuente: OCDE: 2015.

La situación extrema de las economías campesinas en Colombia enfrenta a la población rural a un rápido deterioro y a su imposibilidad para soportar unos niveles mínimos de calidad de vida. Surgen entonces modalidades de terciarización del empleo rural como una alternativa de ocupación y de generación de ingresos, en muchos casos precaria. Habría que preguntarse por qué las políticas nacionales no han privilegiado la seguridad alimentaria del país, argumento esgrimido por los países desarrollados para crear barreras al comercio en este tipo de productos durante las negociaciones bilaterales y multilaterales, debate que aún permanece ausente de las agendas de las políticas públicas en Colombia.

¿Es posible aportar desde la academia?

En este contexto, la geografía reactiva hoy sus métodos y perspectivas teóricas, y junto con otras disciplinas, aborda los roles y los procesos de los actores sociales en la construcción de los territorios, contribuye al análisis y a la resolución de conflictos territoriales con enfoques que van desde el determinismo, la geografía sistémica, la ecología política, la ciencia espacial y la geografía humanística.

La geografía aporta insumos para la formulación de políticas públicas, cimentadas en criterios de viabilidad ambiental y, en especial, nos suministra elementos para el re-ordenamiento los territorios afectados por el conflicto y las dinámicas de extracción, reconociendo las huellas que han dejado las diferentes sociedades y sus dinámicas socioeconómicas. Los conocimientos geográficos nos permiten identificar y caracterizar los ecosistemas del territorio nacional, su estado actual, su metabolismo y fragilidades, a la vez que entrega herramientas que conduzca a minimizar los efectos socio-ambientales, en la búsqueda del rescate de los ecosistemas desequilibrados y deteriorados, hacia la sostenibilidad de los mismos.

Bajo estas consideraciones será plausible pensar en unos acuerdos de paz que partan de una visión del desarrollo territorial con criterios de sostenibilidad ambiental y que tengan en cuenta las nuevas funcionalidades de lo rural. Para lograr esto, se debe resolver en primer lugar, los problemas de la concentración de la propiedad de la tierra en Colombia, de la ausencia del Estado y de políticas de desarrollo, lo anterior debe influir en la mejora de la calidad de vida para los pobladores y en la producción en espacios geográficos, donde lo ambiental deje de ser considerado y asumido como stock, y se articule bajo condiciones ecosistémicas.

Los elementos generales aquí enunciados nos remiten a los aportes que tanto docentes, investigadores, como estudiantes de la Universidad Nacional de Colombia han venido indagando en los últimos años, ya sea a través de tesis doctorales, de maestría, de trabajos de grado y de otras investigaciones en temas referidos a la problemática rural, a la seguridad alimentaria, a la huella ecológica y alimentaria, a las áreas estratégicas y a las transformaciones territoriales, a los instrumentos económicos y a los incentivos sectoriales, a los sistemas productivos, a las relaciones urbano-rurales, entre otros. Este no es el momento de quedarnos en diagnósticos, sino de utilizar estos saberes acumulados, incluso de otros actores, para configurar apuestas concretas que puedan convertirse en políticas de Estado, más que en políticas sectoriales o de gobierno. Esto permitirá impulsar cambios institucionales que propicien verdaderas transformaciones estructurales y de largo plazo para el desarrollo de una ruralidad incluyente, equitativa y sostenible ambientalmente, para lo cual, la academia tiene mucho que aportar, particularmente la disciplina de la geografía, que con sus distintas aproximaciones a las realidades del territorio nacional, ha aportado a la priorización de estos temas de trabajo e investigación en los últimos años.

Este es el reto y la responsabilidad que debe asumir la academia.

Bibliografía

DEPARTAMENTO ADMINISTRATIVO NACIONAL DE ESTADISTICA (2014). Censo Nacional Agropecuario. (En línea: documento electrónico). Consultado en: http://www.dane.gov.co/index.php/Censo-Nacional-Agropecuario-2014

LEÓN, N. (2012). “Crisis, reprimarización y territorio en economías emergentes: caso Colombia”. En: Crisis económica e impactos territoriales - V Jornadas de Geografía Económica AGE. Gerona: Universidad de Girona 2012. Consultado en: http://www3.udg.edu/publicacions/vell/electroniques/Crisis_economica_e_impactos_territoriales/2/2_1_LEON_RODRIGUEZ.pdf

LEÓN, N., MESA, C. y ISAZA, J. (2012). Las transformaciones del sector rural en Colombia desde las reformas neoliberales: un análisis entre 1980-2004. Bogotá: Universidad de La Salle.

LLORENTE, L, SALAZAR, A. y GALLO, A. (1985). Distribución de la propiedad rural en Colombia 1960-1984. Bogotá: CEGA.

UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA-INSTITUTO DE ESTUDIOS AMBIENTALES (2013). Propuesta de nuevos tributos en el marco del artículo 184 de la Ley 1607 de 2012. Bogotá: Universidad Nacional.

MINISTERIO DEL TRABAJO (2016). Fuente de Información Laboral de Colombia. (En línea: documento electrónico). Consultado en: http://filco.mintrabajo.gov.co/

OCDE. (2015). Revisión de la OCDE de las políticas agrícolas: Colombia 2015. Evaluación y recomendaciones de política. Consultado en: http://www.oecd.org/countries/colombia/OECD-Review-Agriculture-Colombia-2015-Spanish-Summary.pdf

PNUD. (2011).Colombia rural. Razones para la esperanza. Bogotá. INDH-PNUD. Consultado en: http://www.co.undp.org/content/dam/colombia/docs/DesarrolloHumano/undp-co-resumen_ejecutivo_indh2011-2011.pdf


1 Este documento fue presentado en el Seminario Conflictos Territoriales y Acuerdos de Paz, organizado por la Maestría de Ordenamiento Territorial y el Departamento de Geografía de la Universidad Nacional de Colombia, el 25 y 26 de febrero 2016.

Recibido: 20 de abril de 2016

Aprobado: 3 de junio de 2016

https://doi.org/10.15446/bitacora.v26n2.59293

26

Artículos

Exportaciones agroalimentarias

Importaciones agroalimentarias

Balance agroalimentario

Recibido: 20 de abril de 2016; Aceptado: 3 de junio de 2016

Resumen

En el presente artículo se exploran algunos datos asociados a la problemática rural. Varias son las dimensiones que podemos resaltar de esta problemática, entre ellas, la seguridad alimentaria, la huella ecológica, el empleo en las áreas rurales, y la conservación de áreas estratégicas. Además, hay que concebir la problemática rural y ambiental en el marco las transformaciones territoriales, respecto de los instrumentos económicos y los incentivos sectoriales, los sistemas productivos y las relaciones urbano-rurales, entre otros. En el texto se sugiere que en la actualidad se dispone de una gran cantidad de conocimientos e investigaciones realizadas para poder dar respuesta a los retos que traiga el posconflicto, lo importante es consolidar una política de Estado capaz de articular múltiples saberes y esfuerzos.

Palabras clave

Acuerdos de Paz, Propiedad de la Tierra, Sector Agropecuario, Ambiente.

Abstract

In this article, are explored some data associated with rural issues. There are several dimensions that can highlight of this problem, including food security, ecological footprint, employment in rural areas and the conservation of strategic areas. In addition, we must conceive of rural and environmental problems under territorial changes, regarding economic instruments and sectoral incentives, production systems and urban-rural relations, among others. The text suggests that at present we has a lot of knowledge and research to be able to respond to the challenges of the post-conflict, it is important to consolidate a state policy capable of articulating multiple knowledge and efforts.

Keywords

Peace Accords, Land Ownership, Agricultural Sector, Environment.

Resumo

Neste artigo alguns dados associados com questões rurais são explorados. Há várias dimensões que podem destacar deste problema, incluindo a segurança alimentar, pegada ecológica, o emprego nas zonas rurais e a conservação de áreas estratégicas. Além disso, temos de conceber problemas rurais e ambientais sob as mudanças territoriais, relativas a instrumentos económicos e incentivos setoriais, sistemas de produção e as relações urbano- rurais, entre outros. O texto sugere que, actualmente, tem um monte de conhecimento e pesquisa para ser capaz de responder aos desafios de trazer o pós-conflito, é importante para consolidar uma política de Estado capaz de articular o conhecimento múltiplo e esforços.

Palavras-chave

Acordos de Paz, propriedade da terra, setor agrícola, Ambiente.

El agro colombiano un contexto de obligada mirada

La aproximación a las consideraciones del territorio y del ambiente como un prerrequisito para los acuerdos de paz en Colombia conducen a una revisión general del comportamiento sectorial en las últimas décadas, la cual, da cuenta de sus dinámicas. Siguiendo la información de la Tabla 1, la contribución de la agricultura colombiana al PIB descendió del 16.7% en 1990 al 8.9% en el año 2000, y continuó cayendo a un ritmo más moderado durante la década siguiente, hasta situarse en 6.1% en el año 2013

Tabla 1.: La agricultura en la economía colombiana 1990-2013

Tabla 1. La agricultura en la economía colombiana 1990-2013

Así mismo, la contribución del sector al empleo también experimentó un descenso del 26% en 1990 y al 17.5% en el año 2013. Si estas cifras se comparan con las de los años 50 del siglo XX cuando la agricultura representaba aproximadamente el 55% del empleo total, este descenso ha sido considerable (Ministerio del Trabajo, 2016).

Como se puede concluir de este comportamiento, el sector agropecuario ha perdido relevancia durante la última década en el contexto macroeconómico, impactando, no sólo su contribución al empleo, sino a la producción de alimentos e insumos fundamentales para la agroindustria y la industria, y a las diferentes dinámicas socioeconómicas características del territorio.

La Tabla 2 permite ver que la pequeña propiedad (definida por el PNUD (2011) como una propiedad de menos de 50 hectáreas), que para el año 1984 ocupaba cerca del 31.1% del territorio nacional y estaba en manos de 92.3% de los propietarios, para el año 2009 representaba el 33,03% del total y estaba en manos del 87,26% de los propietarios, mientras que los medianos propietarios perdieron participación al reducir de 45.6% a 38.45% su participación, a diferencia de la gran propiedad que se expandió del 23.3% en 1984 al 28.52% en 2009. Esto evidencia una concentración de la propiedad de la tierra en detrimento de mediano y el pequeño propietario, quienes han perdido peso dentro de la propiedad rural. Adicionalmente, se debe mencionar la informalidad en los derechos sobre la tenencia de la tierra que se presentan en diferentes áreas del país, unido a los procesos de desplazamiento, despojo, abandono y usurpación de las tierras por causas violentas que se han dado en las últimas décadas y que dificultan enormemente tener certezas sobre la situación jurídica de grandes extensiones de tierra en las zonas rurales.

Tabla 2.: La propiedad de la tierra en Colombia, 1984-2009

Tabla 2. La propiedad de la tierra en Colombia, 1984-2009

De otro lado, en Colombia se viene dando un proceso de relatifundización, dinámica que se profundizó desde finales de siglo XX y comienzos del XXI. La presencia de la economía del narcotráfico, del paramilitarismo, de las diferentes violencias unidas al desplazamiento han marcado y reorientado las formas de concentración de la propiedad y, en general, de la propiedad rural. El desplazamiento forzado y los desplazados ambientales dan cuenta de los conflictos por los cambios en el uso del suelo, de los impactos y pasivos ambientales derivados del modelo de desarrollo extractivista al que le apostó el país, y de las profundas transformaciones del territorio.

En los últimos años, Colombia se viene insertando en los mercados globales a través de las exportaciones procedentes del sector primario, particularmente, del sector de los hidrocarburos y la minería. El siglo XXI comienza con una alta contribución de este sector al PIB nacional, tendencia que se presenta con mayor énfasis hacia finales de la década de 2000. En gran medida, eso obedece, de un lado, al comportamiento de la demanda internacional por este tipo de recursos naturales y, por otro, a una política económica nacional que identificó en ellos una oportunidad para su desarrollo, sin dimensionar el alcance de los pasivos ambientales que se derivarían de la implementación de un Plan Nacional de Desarrollo soportado exclusivamente en la Locomotora minera (León, 2012).

El territorio colombiano ha visto evolucionar la producción agrícola. Con la sustitución rápida hacia los cultivos comerciales, que se van perfilando como la posibilidad de inserción en los mercados internacionales pareciera el sector agrícola tener un futuro próspero, pero precisamente son dichos cultivos comerciales los que sufren el impacto de las medidas neoliberales que propugnan por unos mayores niveles de productividad. Las economías campesinas resultan fuertemente impactadas, no solamente por las medidas de apertura económica, sino, por la ausencia de mecanismos de protección y de apoyos institucionales y por los altos costos de transacción que, en conjunto, ubican al sector rural colombiano en serias desventajas para competir con los productos importados (procedentes, especialmente, de países altamente desarrollados) con enormes subsidios y barreras proteccionistas.

Como se puede observar en la gráfica 1, en los últimos años se evidencia un incremento de las importaciones agroalimentarias sin precedentes en la historia del país, coincidiendo con un período donde el sector minero-energético tuvo mayor participación en el PIB total de la economía. Lo anterior, se expresa en los cambios en el uso del suelo, afectando la seguridad alimentaria de algunas áreas que entran a depender de otras economías campesinas, pero con serias externalidades negativas que han quedado en los territorios y en las comunidades.

Gráfica 1: Comercio agroalimentario de Colombia: 1991-2013

Gráfica 1 Comercio agroalimentario de Colombia: 1991-2013

La situación extrema de las economías campesinas en Colombia enfrenta a la población rural a un rápido deterioro y a su imposibilidad para soportar unos niveles mínimos de calidad de vida. Surgen entonces modalidades de terciarización del empleo rural como una alternativa de ocupación y de generación de ingresos, en muchos casos precaria. Habría que preguntarse por qué las políticas nacionales no han privilegiado la seguridad alimentaria del país, argumento esgrimido por los países desarrollados para crear barreras al comercio en este tipo de productos durante las negociaciones bilaterales y multilaterales, debate que aún permanece ausente de las agendas de las políticas públicas en Colombia.

¿Es posible aportar desde la academia?

En este contexto, la geografía reactiva hoy sus métodos y perspectivas teóricas, y junto con otras disciplinas, aborda los roles y los procesos de los actores sociales en la construcción de los territorios, contribuye al análisis y a la resolución de conflictos territoriales con enfoques que van desde el determinismo, la geografía sistémica, la ecología política, la ciencia espacial y la geografía humanística.

La geografía aporta insumos para la formulación de políticas públicas, cimentadas en criterios de viabilidad ambiental y, en especial, nos suministra elementos para el re-ordenamiento los territorios afectados por el conflicto y las dinámicas de extracción, reconociendo las huellas que han dejado las diferentes sociedades y sus dinámicas socioeconómicas. Los conocimientos geográficos nos permiten identificar y caracterizar los ecosistemas del territorio nacional, su estado actual, su metabolismo y fragilidades, a la vez que entrega herramientas que conduzca a minimizar los efectos socio-ambientales, en la búsqueda del rescate de los ecosistemas desequilibrados y deteriorados, hacia la sostenibilidad de los mismos.

Bajo estas consideraciones será plausible pensar en unos acuerdos de paz que partan de una visión del desarrollo territorial con criterios de sostenibilidad ambiental y que tengan en cuenta las nuevas funcionalidades de lo rural. Para lograr esto, se debe resolver en primer lugar, los problemas de la concentración de la propiedad de la tierra en Colombia, de la ausencia del Estado y de políticas de desarrollo, lo anterior debe influir en la mejora de la calidad de vida para los pobladores y en la producción en espacios geográficos, donde lo ambiental deje de ser considerado y asumido como stock, y se articule bajo condiciones ecosistémicas.

Los elementos generales aquí enunciados nos remiten a los aportes que tanto docentes, investigadores, como estudiantes de la Universidad Nacional de Colombia han venido indagando en los últimos años, ya sea a través de tesis doctorales, de maestría, de trabajos de grado y de otras investigaciones en temas referidos a la problemática rural, a la seguridad alimentaria, a la huella ecológica y alimentaria, a las áreas estratégicas y a las transformaciones territoriales, a los instrumentos económicos y a los incentivos sectoriales, a los sistemas productivos, a las relaciones urbano-rurales, entre otros. Este no es el momento de quedarnos en diagnósticos, sino de utilizar estos saberes acumulados, incluso de otros actores, para configurar apuestas concretas que puedan convertirse en políticas de Estado, más que en políticas sectoriales o de gobierno. Esto permitirá impulsar cambios institucionales que propicien verdaderas transformaciones estructurales y de largo plazo para el desarrollo de una ruralidad incluyente, equitativa y sostenible ambientalmente, para lo cual, la academia tiene mucho que aportar, particularmente la disciplina de la geografía, que con sus distintas aproximaciones a las realidades del territorio nacional, ha aportado a la priorización de estos temas de trabajo e investigación en los últimos años.

Este es el reto y la responsabilidad que debe asumir la academia.

Referencias

DEPARTAMENTO ADMINISTRATIVO NACIONAL DE ESTADISTICA (2014). Censo Nacional Agropecuario. (En línea: documento electrónico). Consultado en: http://www.dane.gov.co/index.php/Censo-Nacional-Agropecuario-2014

LEÓN, N. (2012). “Crisis, reprimarización y territorio en economías emergentes: caso Colombia”. En: Crisis económica e impactos territoriales - V Jornadas de Geografía Económica AGE. Gerona: Universidad de Girona 2012. Consultado en: http://www3.udg.edu/publicacions/vell/electroniques/Crisis_economica_e_impactos_territoriales/2/2_1_LEON_RODRIGUEZ.pdf

LEÓN, N., MESA, C. y ISAZA, J. (2012). Las transformaciones del sector rural en Colombia desde las reformas neoliberales: un análisis entre 1980-2004. Bogotá: Universidad de La Salle.

LLORENTE, L, SALAZAR, A. y GALLO, A. (1985). Distribución de la propiedad rural en Colombia 1960-1984. Bogotá: CEGA.

UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA-INSTITUTO DE ESTUDIOS AMBIENTALES (2013). Propuesta de nuevos tributos en el marco del artículo 184 de la Ley 1607 de 2012. Bogotá: Universidad Nacional.

MINISTERIO DEL TRABAJO (2016). Fuente de Información Laboral de Colombia. (En línea: documento electrónico). Consultado en: http://filco.mintrabajo.gov.co/

OCDE. (2015). Revisión de la OCDE de las políticas agrícolas: Colombia 2015. Evaluación y recomendaciones de política. Consultado en: http://www.oecd.org/countries/colombia/OECD-Review-Agriculture-Colombia-2015-Spanish-Summary.pdf

PNUD. (2011).Colombia rural. Razones para la esperanza. Bogotá. INDH-PNUD. Consultado en: http://www.co.undp.org/content/dam/colombia/docs/DesarrolloHumano/undp-co-resumen_ejecutivo_indh2011-2011.pdf

Notas

Este documento fue presentado en el Seminario Conflictos Territoriales y Acuerdos de Paz, organizado por la Maestría de Ordenamiento Territorial y el Departamento de Geografía de la Universidad Nacional de Colombia, el 25 y 26 de febrero 2016.

Cómo citar

APA

Rodríguez, N. L. (2016). Territorio y ambiente: Prioridad en los acuerdos de paz. Bitácora Urbano Territorial, 26(2), 91–94. https://doi.org/10.15446/bitacora.v26n2.59293

ACM

[1]
Rodríguez, N.L. 2016. Territorio y ambiente: Prioridad en los acuerdos de paz. Bitácora Urbano Territorial. 26, 2 (jul. 2016), 91–94. DOI:https://doi.org/10.15446/bitacora.v26n2.59293.

ACS

(1)
Rodríguez, N. L. Territorio y ambiente: Prioridad en los acuerdos de paz. Bitácora Urbano Territorial 2016, 26, 91-94.

ABNT

RODRÍGUEZ, N. L. Territorio y ambiente: Prioridad en los acuerdos de paz. Bitácora Urbano Territorial, [S. l.], v. 26, n. 2, p. 91–94, 2016. DOI: 10.15446/bitacora.v26n2.59293. Disponível em: https://revistas.unal.edu.co/index.php/bitacora/article/view/59293. Acesso em: 20 abr. 2024.

Chicago

Rodríguez, Nohra León. 2016. «Territorio y ambiente: Prioridad en los acuerdos de paz». Bitácora Urbano Territorial 26 (2):91-94. https://doi.org/10.15446/bitacora.v26n2.59293.

Harvard

Rodríguez, N. L. (2016) «Territorio y ambiente: Prioridad en los acuerdos de paz», Bitácora Urbano Territorial, 26(2), pp. 91–94. doi: 10.15446/bitacora.v26n2.59293.

IEEE

[1]
N. L. Rodríguez, «Territorio y ambiente: Prioridad en los acuerdos de paz», Bitácora Urbano Territorial, vol. 26, n.º 2, pp. 91–94, jul. 2016.

MLA

Rodríguez, N. L. «Territorio y ambiente: Prioridad en los acuerdos de paz». Bitácora Urbano Territorial, vol. 26, n.º 2, julio de 2016, pp. 91-94, doi:10.15446/bitacora.v26n2.59293.

Turabian

Rodríguez, Nohra León. «Territorio y ambiente: Prioridad en los acuerdos de paz». Bitácora Urbano Territorial 26, no. 2 (julio 1, 2016): 91–94. Accedido abril 20, 2024. https://revistas.unal.edu.co/index.php/bitacora/article/view/59293.

Vancouver

1.
Rodríguez NL. Territorio y ambiente: Prioridad en los acuerdos de paz. Bitácora Urbano Territorial [Internet]. 1 de julio de 2016 [citado 20 de abril de 2024];26(2):91-4. Disponible en: https://revistas.unal.edu.co/index.php/bitacora/article/view/59293

Descargar cita

CrossRef Cited-by

CrossRef citations1

1. Fanny Howland. (2022). Local climate change policy and rural development in Colombia’s post-peace agreements context. International Journal of Agricultural Sustainability, 20(7), p.1260. https://doi.org/10.1080/14735903.2022.2098641.

Dimensions

PlumX

Visitas a la página del resumen del artículo

847

Descargas

Los datos de descargas todavía no están disponibles.