Variabilidad y tendencias de la precipitación en San Andrés y Providencia, 1988–2022

Precipitation variability and trends in San Andrés and Providencia, 1988–2022

El agua dulce es un recurso esencial y escaso en el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina. La precipitación es la forma de acceso más directa y barata. La lluvia, además, alimenta las aguas subterráneas que son otra fuente de abastecimiento utilizada frecuentemente. El objetivo de este artículo es caracterizar, mediante estadística descriptiva, la variabilidad temporal de la precipitación diaria, mensual y anual en siete sitios de las islas de Providencia y San Andrés. La precipitación media anual en estas islas es del orden de 1800 mm y el régimen es de tipo mixto, con una temporada seca, una muy húmeda y dos moderadamente húmedas. Durante El Niño y La Niña se presentan alteraciones en la temporada moderadamente húmeda de mediados del año calendario y en octubre, que es el mes más lluvioso. En el largo plazo se observan tendencias significativas (α=0.05) crecientes y decrecientes en la precipitación de algunos meses, pero no en la precipitación anual. El diagnóstico de variabilidad pluviométrica que se presenta es un insumo importante para la gestión del agua en aspectos como el suministro de agua potable a la población, el manejo de cultivos, la seguridad alimentaria, la planificación del turismo, el control de la erosión y la prevención y la mitigación de emergencias por exceso o déficit de lluvias.

Fresh water is an essential and scarce resource in the archipelago of San Andrés, Providencia and Santa Catalina. Precipitation is the most direct and cheapest form of access. Rain also feeds groundwater, which is another frequently used source of supply. The objective of this article was to characterize, through descriptive statistics, the temporal variability of daily, monthly and annual precipitation in seven sites on the islands of Providencia and San Andrés. The average anual precipitation on these islands is around 1800 mm and the regime is mixed, with one dry season, one very humid season and two moderately humid seasons. During El Niño and La Niña, alterations occur in the moderately wet season in the middle of the calendar year and in October, which is the rainiest month. In the long term, significant increasing and decreasing trends (α=0.05) are observed in the precipitation of some months, but not in the annual precipitation. The diagnosis of rainfall variability presented is an important input for wáter management in aspects such as the supply of drinking water to the population, crop management, food security, tourism planning, erosion control and prevention and mitigation of emergencies due to excess or deficit of rain.