Ciencia Política

Los estudios sobre la producción social del espacio han venido ganando en importancia en nuestro país durante la última década y se encuentran en
la actualidad en el centro del debate teórico y político. Ello se explica en buena medida por el modelo económico que ha impuesto la dinámica de la acumulación capitalista. En tal modelo, la tierra y el territorio ocupan un lugar preponderante. La decisión política de propiciar un proceso de reprimarización de la economía, inmerso en los procesos de la acumulación especulativa y de la financiarización transnacional, está produciendo una profunda reorganización espacial y un nuevo ordenamiento del territorio en nuestro país. En sentido estricto, se ha asistido (y se está asistiendo) a
un nuevo ciclo de conquista y de colonización capitalista de la geografía nacional, en el que se ha conjugado (y se conjuga) el ejercicio recurrente de la violencia, con un pretendido orden del derecho.

En diversos ámbitos y con diferenciados alcances, a través grupos de investigación en universidades, de centros de investigación independiente o de organizaciones no gubernamentales se vienen realizando esfuerzos por comprender y caracterizar las tendencias en curso de la producción social del espacio, así como las viejas y nuevas conflictividades que ella viene generando. El pensamiento crítico ha encontrado, sin duda, nuevas posibilidades y potencialidades.

En ese contexto, desde hace cerca de un lustro, el grupo interdisciplinario de estudios políticos y sociales Theseus inició las discusiones que lo llevarían a la conceptualización de una de sus actuales líneas de investigación: la producción social del espacio y las nuevas geografías de la acumulación. Los trabajos que conforman el tema central del presente número de la revista Ciencia Política, titulado “Espacialidad, política y acumulación de capital”, son una muestra de los avances de investigación en esa línea. Los textos fueron enriquecidos por un debate colectivo de más de un año, en el que se buscó avanzar en la definición de un marco teórico, conceptual y analítico relativamente común que, teniendo como eje principal la lectura política de procesos de acumulación de capital, pudiese avanzar hacia una explicación más comprehensiva de los procesos de producción del espacio y de la organización del territorio ocurridos en nuestro país a lo largo de las últimas décadas. En ese sentido, se mostraron los límites de los enfoques de la violencia como proceso relativamente autónomo y restringido al campo exclusivo de la política o de la cultura, y se concluyó en la necesaria incorporación del estudio de procesos de acumulación desde una perspectiva que trascendiese entendimientos meramente económicos. A los trabajos

que hacen parte del tema central les es común una perspectiva de economía política y la categoría de acumulación por despojo, con el fin de lograr precisamente una mejor comprensión de la producción del espacio y del territorio en cuanto procesos sociales y expresiones de la historicidad de las relaciones de poder y de dominación.