Una opinión : la ciencia, los científicos y la industria nacional

El éxito de una política científica nacional depende del mejor conocimiento de los factores que la condicionan, los objetivos que persiga y su eficaz instrumentación, ejecución y control. Creemos que los científicos del país, cualquiera sea el número exacto de los que se consideren como tales, prestigio, edad y sitio de trabajo se muestran en acuerdo con esta formulación. Este es un rasgo positivo de la colectividad de hombres y mujeres de ciencia del país en la actualidad, que nos satisface constatar.

Sin embargo, al tratar de conocer los factores que juegan en el desarrollo del cono- cimiento científico y su aplicación en Colombia, finalidades y eficiente realización, surgen complicaciones inexplicables que impiden despegar, adoptar el ritmo de avance que la historia demanda.

Los intentos de marginar la ciencia de la industria, de los intereses prácticos que reforzaron el ideal de la ciencia pura, han perdido vigencia y cuando más, los contemplan con nostalgia dos o tres que dejan de tener en cuenta las limitaciones de que adolecen.

La evolución general de la ciencia y de la industria nos conduce a formas organizativas complicadas, y lo que debe hacerse es tratar de interpretarlas y procurar que la más idónea se utilice con efectividad y miras patrióticas. Los científicos colombianos anuncian su disposición de hacerlo. Pero continuamos estancados en la práctica considerando que la causa de este fenómeno se vincula íntimamente con la dependencia económica y cultural que afecta a nuestra sociedad. Hay que investigar, hacer sociología de la ciencia, recurrir a la antropología social en el universo de la ciencia como factor poderoso de la vida de los agrupamientos humanos; disciplinas ambas muy poco cultivadas en el país. En Estados Unidos se han hecho y se hacen publicaciones sobre sociología de la ciencia. Los estudios en Rusia se ocupan con frecuencia del tema.