¿Qué se Aprende en la Visita a un Museo?

2014-10-26

¿Hay o no un aprendizaje después de la visita a un museo? y en caso de darse, ¿Qué tipo de contenido se adquiere, de qué manera puede medirse y qué factores lo dificultan o facilitan?

Gaea Leinhardt, Ph.D. en Investigación en Educación de la Universidad de Pittsburgh, se sumergió durante 18 meses en las salas de cinco museos estadounidenses, recopilando conversaciones de 178 grupos de visitantes. Parte de esta investigación fue recientemente publicada en la Revista Colombiana de Psicología en un artículo titulado “Museos, Conversaciones y Aprendizaje”.

El amplio contexto de la investigación en museos ha implicado, según Leinhardt (2014), el análisis de las variables demográficas que permiten describir al público que asiste a estos espacios para evaluar sus características y desarrollar estrategias de mercadeo.

Preguntas acerca de la existencia de diferencias entre asistir con o sin motivación a una exposición, o si el aprendizaje depende de si se asiste solo o acompañado, han sido poco abordadas. La búsqueda de estas respuestas ha significado para la doctora Leinhardt  un trabajo de más de 6 años. Junto a su grupo de colaboradores, ha desarrollado el Modelo de Aprendizaje en Museos (MAM), en el cual se integran múltiples factores de una visita a un museo, como la identidad (expectativas y motivaciones personales), la configuración de los espacios y el contenido de las conversaciones de los asistentes (temas relacionados con el contenido de la exposición o desligados de ella).

La manera en la cual Leinhardt ha trabajado este tema ha sido por medio del registro de conversaciones cotidianas durante las visitas. Realiza preguntas a los visitantes antes y después del recorrido sobre las exposiciones, y posteriormente codifica dichas respuestas a partir de distintas categorías (con un orden jerárquico evaluado y definido).

En general, de acuerdo con Leinhardt, tanto los grupos que aprenden poco, como los que aprenden más, conversan acerca de elementos relacionados o no con la exhibición Sin embargo, las conversaciones enfocadas en experiencias personales son un obstáculo para la exploración de los objetos e ideas de las exposiciones. En cambio, a medida que “…el sentido de identidad de los visitantes incluía una posición de aprendizaje y un sentido de pertenencia o afiliación con el museo, la probabilidad de aprender se incrementaba” (Leinhardt, 2014, p. 54).

Finalmente, Leinhardt evaluó ese conocimiento adquirido que se identificó como aprendizaje del contenido, mediante preguntas posteriores a la visita. Lo que encontró, fue que quienes se involucran más con el ambiente del museo (e. g. leer o discutir paneles informativos), aprenden más.

Para conocer más detalles de la investigación de Gaea Leinhardt consulte la publicación aquí:

Leinhardt, G. (2014). Museos, conversaciones y aprendizaje. Revista Colombiana de Psicología, 23(1), 35-56.

 

 

MARÍA PAULA ARTEAGA

Monitora Revista Colombiana de Psicología

Universidad Nacional de Colombia