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Publicado
Rivera Muriel, Juan Fernando. “La filosofía sin filosofía de Alberto Caeiro”
DOI:
https://doi.org/10.15446/ideasyvalores.v63n156.47087Palabras clave:
A. Caeiro, poesía (es)Rivera Muriel, Juan Fernando. "La filosofía sin filosofía de Alberto Caeiro", Estudios Filosóficos [Universidad de Antioquia] 48.2 (2013): 23-48.
Hay bastante metafísica en no pensar nada Alberto Caeiro
Cuando vi el nombre Alberto Caeiro en la tabla de contenido de la revista Estudios de Filosofía, me asombré bastante. La curiosidad por saber si se trataba realmente de un artículo sobre uno de los heterónimos de Fernando Pessoa –a quien ahora me cuesta trabajo denominar exclusivamente como poeta o pensador–, me llevó a consultar con premura la versión digital de la revista. El asombro se incrementó cuando encontré que no solo era cierta mi intuición, sino que, además, el autor del artículo era colombiano. Este asombro, que motiva además la escritura de este comentario, se traduce en alegría al encontrar que se está ampliando provechosamente el espectro de temas, autores y modos de reflexión en la filosofía colombiana. Quizá sea demasiado optimista mi apreciación, pero la deuda que tiene la reflexión filosófica con la literatura en nuestro país es tan grande, que el ejercicio de investigación que dio lugar al artículo que me propongo comentar es sumamente valioso no solo por su calidad, sino también por ser casi único en su especie. 1
El artículo se propone aclarar lo que Caeiro entiende por pensar, a partir del uso de los términos "Realidad", "ver", "interior" y "exterior", en uno de los poemas que conforman el libro Poemas inconjuntos. Quisiera plantear al autor y a los lectores del artículo tres consideraciones: la primera en forma de desavenencia, la segunda en forma de pregunta y la tercera a manera de invitación.
En primer lugar, manifiesto un desacuerdo con la perspectiva desde la cual se analiza la obra de Caeiro, que se hace manifiesta en el título del artículo. Al llamar a su estudio sobre Caeiro "filosofía sin filosofía", Rivera se inscribe en una perspectiva que está invadida por los valores de la tradición metafísica occidental, de la que Caeiro –así como Antonio Mora y el mismo Pessoa– quiere desligarse. Si bien el concepto de filosofía que utilizamos en las universidades está determinado por el trabajo conceptual que se ha realizado desde las Meditaciones cartesianas, juzgar como no filosóficas a otro tipo de reflexiones es una reducción de la filosofía que castra la posibilidad de tomar distancia de esa determinación. Por esto considero que es importante redefinir algunos conceptos cuyo significado está fundado en la tradición, en este caso, el de filosofía, ya que si este remite exclusivamente a un ejercicio de análisis, particularmente vinculado con la escritura y la lectura, estamos lejos de poder considerar seriamente el esfuerzo de autores que llevan su trabajo reflexivo a convertirse en una forma de vida, tal como parece suceder con Pessoa. A pesar de que es notable el compromiso que Rivera parece asumir con el tipo de reflexión propuesta por Pessoa –esto se puede ver en el cuidadoso uso de comillas en palabras como "pensar" o "entender" (32)–, considero que aún hay algunos prejuicios que no permiten que preste la justa atención a los planteamientos de Pessoa, porque, antes de ser escuchados, son evaluados con la vara de la tradición filosófica occidental.
En el artículo pueden encontrarse varias afirmaciones que dan cuenta del prejuicio tradicionalista; nombraré a continuación dos de ellas. En la primera, el autor afirma que "[n]os encontramos frente a […] una filosofía sin filosofía, cuya propuesta escapa al filosofar mismo, volviendo sin vacilación al mundo como Naturaleza pre-vivida y, por supuesto, pre-concebida" (27, énfasis agregado). En esta afirmación se hace latente el prejuicio de la tradición, dado que se considera que la manera de asumir el mundo de Pessoa es previa a un tipo de pensamiento que está por venir y que es el que conceptualiza lo sentido. Sin embargo, la reflexión de Pessoa está encaminada, según creo, a mostrar que el sentir es en sí mismo filosofía, que nada está por venir, y que, por eso, no se trata de que el mundo como Naturaleza sea un estado previo o "pre-concebido", sino que ya es.
El prejuicio se hace sentir también en la consideración de Caeiro como un "pensador" que lleva una existencia sin filosofía, a pesar de sus profundos cuestionamientos sobre el lugar que ocupa en el mundo y la manera en que se relaciona, sensible y epistemológicamente, con lo que le rodea: "La propuesta de Caeiro es vivencial y revolucionaria: es un retorno a la certeza por fuera del pensamiento, pues este [el pensamiento] terminará por hallar algo oculto entre las cosas. La máxima prueba de esta revolución es su propia existencia sin filosofía que reconcilia todas las batallas de la razón" (37, énfasis agregado). Valdría la pena, entonces, preguntarse si la indagación por el sentido de la existencia propia no es un rasgo característico de lo que llamaríamos "actitud filosófica".
En segundo lugar, si se asume que la propuesta de Pessoa es una filosofía, quisiera plantear la pregunta por las posibilidades de su transmisión. ¿Puede concebirse, en un contexto educativo, el ejercicio de pensamiento propuesto por Caeiro? En otras palabras, ¿son el "ver", el "sentir la Realidad absoluta", susceptibles de ser enseñados y aprendidos, o son un ejercicio vital que solo se puede desarrollar individualmente?
En tercer lugar, a partir de afirmaciones como: "[l]a sanidad del cuerpo es superior a la del entendimiento, y ella nos lleva […] a una ética de la aceptación que reconoce la perfección natural de las cosas sin indagarlas, sabiduría pagana y filosofía antifilosófica" (31), me gustaría poner en consideración de Rivera y de otros lectores de Pessoa la importancia del concepto de paganismo en las reflexiones más filosóficas del autor luso. Si bien el concepto está esbozado en varios apartados del artículo con el que aquí dialogo, hace falta profundizar en la relación que este guarda con otras nociones como la de "ver" y "Naturaleza", que resultan fundamentales en el planteamiento de esta manera particular de pensar. En este sentido, vale la pena resaltar que algunas de las afirmaciones del autor, que no son resueltas en el artículo, abren interesantes horizontes de investigación para otros lectores de Pessoa.
Angie Xiomara Bernal Salazar
Universidad Nacional de Colombia - Bogotá - Colombia
abernals@unal.edu.co
NOTAS AL PIE
1 Con el temor de ser tildada de pretenciosa, y a fuerza de mi ignorancia, me atrevo a afirmar que uno de los trabajos de reflexión mejor desarrollados sobre una obra literaria en nuestro país es el realizado por Estanislao Zuleta en su serie de conferencias a propósito de La montaña mágica, recopiladas en el libro: Thomas Mann, la montaña mágica y la llanura prosaica (2010).
Bibliografía
Pessoa, F. El regreso de los dioses.Barcelona: Seix Barral, 1986.
Zuleta, E. Thomas Mann, la montaña mágica y la llanura prosaica. Medellín: Hombre nuevo, 2010.