Publicado

2018-07-01

El plebiscito de 1984 por el canal Beagle en el discurso de la prensa patagónica argentina. El caso del diario Río Negro

The 1984 Referendum on the Beagle Conflict in the Discourse of the Argentinian Patagonian Press. The Rio Negro Journal Case

O plebiscito de 1984 pelo canal Beagle no discurso da imprensa patagônica argentina. O caso do diário Río Negro

DOI:

https://doi.org/10.15446/historelo.v10n20.66047

Palabras clave:

prensa, discurso, Chile, Argentina, frontera, Norpatagonia (es)
Press, Discourse, Chile, Argentina, Border, Northern Patagonia (en)
imprensa, discurso, Chile, Argentina, fronteira, norte da patagônia (pt)

Descargas

Autores/as

En doscientos años como repúblicas independientes Chile y la Argentina emprendieron guerras contra todos sus vecinos pero jamás entre ellas. Sin embargo, en la navidad de 1978 la controversia sobre los límites del canal Beagle estuvo cerca de enfrentar a ambos países en el campo de batalla. Gracias a la oportuna mediación del Papa Juan Pablo II y al posterior retorno de la democracia en la Argentina, el diferendo logró resolverse pacíficamente con la firma de un acuerdo que contó con un abrumador apoyo de la población argentina, expresado a través del plebiscito de 1984. El presente artículo propone analizar los sentidos en torno al acuerdo y la consulta que circularon por las páginas del Río Negro, el diario más influyente de la Norpatagonia argentina. Para ello, incorporando herramientas teóricas del análisis del discurso, hemos relevado noticias, editoriales y notas de opinión publicadas en las secciones en las que el diario abordó información internacional, nacional y regional. Este trabajo permite demostrar que en el diario prevalecieron los discursos favorables al acuerdo por sobre aquellos que proponían una lectura negativa sobre el mismo. El diario presentó a los primeros como expresión del nuevo clima democrático que la sociedad argentina comenzaba a vivir.

In their 200 years as independent nations, both Chile and Argentina fought wars against all their neighbors, except each other. However, on the Christmas of 1978, controversy over the limits of the Beagle Channel almost made them face one other on the battlefield. It was thanks to the timely mediation of Pope John Paul II and Argentina’s later return to democracy that the conflict was pacifically resolved, through an agreement overwhelmingly supported by the Argentinian people, who expressed their approval in the 1984 referendum. The present article aims to analyze the meanings surrounding the agreement and the referendum, expressed in the Rio Negro, the most influential journal of the Argentinian northern Patagonia. In order to achieve it, theoretical tools of discourse analysis are used to study the news, editorials and opinion columns published in the sections in which the newspaper dealt with international, national and regional information. The article shows that in the journal, the positive discourses about the agreement predominated over the negative ones. The former were presented as a manifestation of the new democratic climate experienced by the Argentinian society.

Em duzentos anos como repúblicas independentes o Chile e a Argentina empreenderam guerras contra todos sus vizinhos, mas nunca entre elas. Contudo, o Natal de 1978 a controvérsia sobre os limites do canal Beagle esteve cerca de fazer enfrentar a ambos os países no campo de batalha. Graças à oportuna mediação do Papa João Paulo II e ao posterior retorno da democracia à Argentina, a discrepância conseguiu ser resolvida pacificamente com a assinatura de um acordo que contou com um esmagador apoio da população argentina, representado através do plebiscito de 1984. O presente artigo propõe analisar os sentimentos em torno ao acordo e a consulta que circularam pelas páginas do Río Negro, o diário mais influente do norte da patagônia argentina. Para isto, incorporando ferramentas da Análise do Discurso, comparamos notícias, editoriais e notas de opinião publicadas nas seções em que o diário abordou informação nacional e regional. Este trabalho permite demostrar que no diário prevaleceram os discursos favoráveis ao acordo acima daqueles que propuseram uma leitura negativa sobre o mesmo. O diário apresentou os primeiros como expressão do novo clima democrático que a sociedade argentina começava a viver.

Recibido: 30 de junio de 2017; Aceptado: 27 de enero de 2018

Resumen

En doscientos años como repúblicas independientes Chile y la Argentina emprendieron guerras contra todos sus vecinos pero jamás entre ellas. Sin embargo, en la navidad de 1978 la controversia sobre los límites del canal Beagle estuvo cerca de enfrentar a ambos países en el campo de batalla. Gracias a la oportuna mediación del Papa Juan Pablo II y al posterior retorno de la democracia en la Argentina, el diferendo logró resolverse pacíficamente con la firma de un acuerdo que contó con un abrumador apoyo de la población argentina, expresado a través del plebiscito de 1984. El presente artículo propone analizar los sentidos en torno al acuerdo y la consulta que circularon por las páginas del Río Negro, el diario más influyente de la Norpatagonia argentina. Para ello, incorporando herramientas teóricas del análisis del discurso, hemos relevado noticias, editoriales y notas de opinión publicadas en las secciones en las que el diario abordó información internacional, nacional y regional. Este trabajo permite demostrar que en el diario prevalecieron los discursos favorables al acuerdo por sobre aquellos que proponían una lectura negativa sobre el mismo. El diario presentó a los primeros como expresión del nuevo clima democrático que la sociedad argentina comenzaba a vivir.

Palabras claves:

prensa, discurso, Chile, Argentina, frontera (Thesaurus), Norpatagonia (Autor).

Abstract

In their 200 years as independent nations, both Chile and Argentina fought wars against all their neighbors, except each other. However, on the Christmas of 1978, controversy over the limits of the Beagle Channel almost made them face one other on the battlefield. It was thanks to the timely mediation of Pope John Paul II and Argentina’s later return to democracy that the conflict was pacifically resolved, through an agreement overwhelmingly supported by the Argentinian people, who expressed their approval in the 1984 referendum. The present article aims to analyze the meanings surrounding the agreement and the referendum, expressed in the Rio Negro, the most influential journal of the Argentinian northern Patagonia. In order to achieve it, theoretical tools of discourse analysis are used to study the news, editorials and opinion columns published in the sections in which the newspaper dealt with international, national and regional information. The article shows that in the journal, the positive discourses about the agreement predominated over the negative ones. The former were presented as a manifestation of the new democratic climate experienced by the Argentinian society.

Keywords:

Press, Discourse, Chile, Argentina, Border (Thesaurus), Northern Patagonia (Author).

Resumo

Em duzentos anos como repúblicas independentes o Chile e a Argentina empreenderam guerras contra todos sus vizinhos, mas nunca entre elas. Contudo, o Natal de 1978 a controvérsia sobre os limites do canal Beagle esteve cerca de fazer enfrentar a ambos os países no campo de batalha. Graças à oportuna mediação do Papa João Paulo II e ao posterior retorno da democracia à Argentina, a discrepância conseguiu ser resolvida pacificamente com a assinatura de um acordo que contou com um esmagador apoio da população argentina, representado através do plebiscito de 1984. O presente artigo propõe analisar os sentimentos em torno ao acordo e a consulta que circularam pelas páginas do Río Negro, o diário mais influente do norte da patagônia argentina. Para isto, incorporando ferramentas da Análise do Discurso, comparamos notícias, editoriais e notas de opinião publicadas nas seções em que o diário abordou informação nacional e regional. Este trabalho permite demostrar que no diário prevaleceram os discursos favoráveis ao acordo acima daqueles que propuseram uma leitura negativa sobre o mesmo. O diário apresentou os primeiros como expressão do novo clima democrático que a sociedade argentina começava a viver.

Palavras-chave:

imprensa, discurso, Chile, Argentina, fronteira (Tesauro), norte da patagônia (Autor).

Introducción

La territorialización de la Patagonia argentina se encuentra atravesada por múltiples procesos, varios de los cuales la vinculan a Chile en forma tan profunda como temprana. Entre estos cabe mencionar el continuo desplazamiento de trabajadores hacia uno y otro lado de la cordillera, el cual ha constituido un decisivo aporte para la región, tanto para su funcionamiento económico como para el entramado social y cultural. Sin embargo, esta nutrida presencia de migrantes también ha despertado temores del nacionalismo territorial, los cuales dieron lugar a diversas hipótesis de conflicto que se proyectaron sobre una región “débilmente argentinizada”, alimentando así las más diversas teorías conspirativas (Bohoslavsky 2009). En este sentido, uno de los momentos en que los sectores nacionalistas de ambos países creyeron que se materializaban todos sus temores fue durante el conflicto desatado por el diferendo limítrofe sobre el canal Beagle entre los años 1977 y 1978.

Luego que la dictadura argentina desconociera el fallo arbitral que otorgaba a Chile la soberanía de las islas ubicadas en el canal, comenzó una compleja situación diplomática que tensionó la relación entre ambas países. Hacia fines de 1978 el conflicto pareció desembocar hacia una guerra que apenas pudo evitarse gracias a la mediación del Papa Juan Pablo II. El 10 de diciembre de 1983, Raúl Ricardo Alfonsín asumió la presidencia de la Argentina poniendo fin a la cruenta dictadura militar que durante siete años rigió los destinos de ese país. A los pocos meses de iniciar su gobierno, el nuevo mandatario convocó a un plebiscito para que la población se pronunciase en referencia al acuerdo alcanzado con Chile en torno al litigio sobre el canal Beagle. Esta cuestión constituía un tema delicado para la joven democracia porque en la sociedad argentina aún pervivía el recuerdo de la navidad de 1978 cuando la disputa por el canal y sus islas pareció conducir inexorablemente hacia la guerra.

En función de este nuevo escenario abierto en la Argentina tras el retorno de la democracia y de las particulares relaciones que históricamente vincularon a Chile con la Patagonia, el presente artículo propone analizar las páginas del diario Río Negro para identificar los distintos discursos que circularon en torno a las relaciones entre Chile y la Argentina en el contexto del plebiscito de 1984. Indagar este medio, cuyas características centrales se desarrollarán en el transcurso del artículo, no solo permitirá dar cuenta de la posición adoptada por un actor central de la dinámica política regional, sino también de los discursos que ejercieron mayor influencia en la opinión pública norpatagónica, así como de sus condiciones de producción.

En este sentido, sostenemos como hipótesis inicial que en el contexto mencionado la línea editorial del diario estuvo en consonancia con el discurso desplegado por el gobierno nacional. Esto se debería principalmente a seculares posiciones sostenidas por el Río Negro. La primera, y quizá la de mayor persistencia en el tiempo, consistió en privilegiar la integración al conflicto frente a cada disputa diplomática abierta con Chile. La segunda se relaciona con la afinidad que el diario ha mantenido con el partido radical, principalmente desde mediados del siglo veinte. Para corroborar dicha hipótesis, se estudian las noticias, los artículos de opinión y las editoriales publicadas que el Río Negro publicó a lo largo del año 1984, en las secciones de información internacional, nacional y regional. En nuestro análisis, el discurso no se concibe como un medio transparente por el cual se accede a una “realidad” externa a él, sino que por el contrario, se asume como una forma de construir, mantener y reforzar interpretaciones sobre la misma, a través de la producción de representaciones de la sociedad, de sus actores, de sus prácticas, y del entramado de relaciones en las que se inscriben (Martín Rojo 1997; Chouliaraki y Fairclough 1999; Calsamiglia y Tusón Valls 1999). Entendemos que investigar la prensa desde esta perspectiva nos permite identificar las tensiones sociales y políticas que atravesaron el campo discursivo en el que se inscribió el diario y la forma en que las mismas se fueron plasmando en sus páginas a través de un discurso polifónico en el que se construyeron distintas identidades discursivas (Angenot 2010; Charaudeau y Maingueneau 2005).

El trabajo comienza con un breve recorrido por la historia del conflicto por el canal Beagle y su impacto en la Norpatagonia, luego realiza una caracterización del diario estableciendo la línea editorial que ha sostenido en torno a las relaciones argentino-chilenas hasta la asunción de Raúl Ricardo Alfonsín. En los siguientes apartados analiza los discursos desplegados en el escenario nacional y la posición que asumió el diario frente a los mismos. Hacia el final, el texto centra su indagación en los discursos que tuvieron a la Norpatagonia como escena de enunciación.

La Patagonia y el devenir del conflicto por el Beagle

Desde 1904, la fijación del curso de este canal y el consecuente establecimiento de la soberanía sobre las islas situadas en la zona fue un tema pendiente en la agenda diplomática de ambas cancillerías. En 1967 el presidente chileno Eduardo Frei (1964-1970) impulsó la resolución del diferendo a través del arbitraje de la corona británica. Sin embargo, la dictadura del General Juan Carlos Onganía (1966-1970) rechazó la legalidad de esta instancia alegando no sólo que el carácter unilateral de la decisión violaba el tratado firmado en 1902, sino también que la elección del árbitro vulneraba el Protocolo de 1960 y los acuerdos refrendados en 1964. Estos últimos expresaban con claridad que de no alcanzarse un acuerdo en el caso del Beagle la resolución del diferendo recaería en la Corte Internacional de Justicia de la Haya debido a que el canal se situaba en una zona en la cual la Argentina e Inglaterra se disputaban la soberanía sobre la Antártida y las islas Malvinas. Luego, después de varias negociaciones frustradas, el diferendo pareció encaminarse hacia su resolución definitiva luego de que el presidente chileno Salvador Allende (1970-1973) y el dictador argentino Alejandro Agustín Lanusse (1971-1973) acordaran en 1971 que la cuestión sería sometida a un tribunal presidido por la reina de Inglaterra e integrado por cinco juristas pertenecientes a la corte de la Haya. Estos últimos tendrían la función de pronunciarse en torno al diferendo territorial mientras que la primera sólo quedaba facultada para aceptar o rechazar dicho fallo (Manzano Iturra 2014).

Luego de una espera prolongada, en mayo de 1977 el tribunal hizo pública su decisión de otorgar a Chile la soberanía sobre las islas Lennox, Nueva y Picton. La dictadura argentina interpretó que el fallo le era adverso y reaccionó declarándolo “insalvablemente nulo”, argumentando que no sólo incurría en “errores jurídicos” sino también que desconocía en forma absoluta sus “fundamentos históricos” (Cisneros y Escudé 2000). A partir de ese momento comenzó una compleja y delicada situación diplomática que tensionó las relaciones entre ambas dictaduras hasta un punto que parecía sin retorno.

En los meses que duró este clima prebélico, los ejercicios de oscurecimiento se tornaron tan cotidianos en la Patagonia como las noticias sobre el endurecimiento de los controles migratorios y la deportación de trabajadores chilenos por parte de las autoridades militares (Azcoitia 2014). Para comprender la perspectiva castrense sobre el tema basta recorrer la caracterización de la comunidad chilena en la región que hacia 1969 hiciera el influyente general Osiris Guillermo Villegas.1 En su libro “Políticas y estrategias para el desarrollo y la Seguridad Nacional” el general afirmaba que la Argentina debía prestar especial atención a la región fronteriza de “Comahue y Patagonia”, entre otros motivos, porque el “elemento étnico” que conformaba la numerosa corriente migratoria trasandina no era “de calidad deseable” (Villegas 1969).2 Asimismo, advertía también sobre el “fuerte espíritu nacional” que poseían dichos migrantes, el cual, según Villegas, era alimentado en forma permanente tanto por la acción de los cónsules y líderes radicados en la zona, como por los “poderosos medios radioeléctricos de comunicación trasandinos”. El general concluía que de esta forma los chilenos mantenían vivo “el recuerdo de las pretensiones reivindicatorias [...]” sobre los territorios argentinos (Villegas 1969, 209-210).

La navidad de 1978 encontró a los ejércitos de ambos países movilizados y prestos para comenzar una guerra que sólo la oportuna mediación de Juan Pablo II pudo evitar. Años después, el general Juan Bautista Sasiaiñ, al mando de las tropas apostadas en Junín de los Andes y Bariloche, declararía a la prensa que “Con el pie apoyado para el salto y el dedo en el gatillo [...]” habían recibido la orden de replegarse.3 Sin embargo, a pesar del optimismo inicial que la intervención vaticana provocó a uno y otro lado de la cordillera, las negociaciones sobre el Beagle permanecieron prácticamente estancadas hasta la caída de la dictadura militar en la Argentina.

Con el comienzo de la transición democrática el conflicto se situó en un escenario completamente distinto. El flamante presidente constitucional, Raúl Ricardo Alfonsín (1983-1989), asumió el compromiso de desmantelar el autoritarismo militar y de generar condiciones para el goce pleno de los derechos civiles. El nuevo contexto promovió un profundo proceso de repolitización de la sociedad argentina, no sólo al reinstalar demandas postergadas por la dictadura, sino también por las promesas y expectativas que el propio cambio de régimen despertaba (Lesgart 2003).

En materia de política exterior, el nuevo gobierno implementó una estrategia tendiente a recomponer la imagen de la Argentina, fuertemente deteriorada por las denuncias sobre la violación de derechos humanos, el incumplimiento del laudo arbitral de 1977 y la ocupación militar de las islas Malvinas (Russell y Hirst 1987). En relación a Sudamérica, la gestión radical vislumbraba la emergencia de una nueva fase histórica en la región, caracterizada por dos desafíos claves: la consolidación de la democracia y del proceso de integración (Rodríguez 2011). En este marco se propuso resolver los temas pendientes en la agenda bilateral con Chile,4 comenzando por la cuestión del canal Beagle. Para el gobierno radical desmontar los escenarios conflictivos en la región permitiría legitimar una sustantiva reducción del presupuesto militar,5 a la vez que contribuiría a la estrategia tendiente a debilitar a las Fuerzas Armadas en tanto actor político, subordinarlas definitivamente al control civil (Battaglino 2013). El primer paso hacia el acercamiento con Chile se concretó en enero de 1984, con la firma de una Declaración Conjunta de Paz y Amistad en la que ambos países manifestaban su intención de alcanzar una solución “justa y honorable” para los diferendos limítrofes. En este marco, el 25 de julio de 1984, el presidente Raúl Ricardo Alfonsín anunció que el acuerdo con Chile sería sometido a una consulta popular, en un claro intento por legitimar una negociación cuyo principal objetivo era clausurar definitivamente el conflicto en torno al Beagle (Cisneros y Escudé 2000).

El diario Río Negro y las relaciones argentino-chilenas

El 1° de mayo de 1912 Fernando Emilio Rajneri fundó el Río Negro en la ciudad rionegrina de General Roca. Este periódico6 evidenció tempranamente su pretensión de erigirse en un actor político7 regional con capacidad de amplificar las demandas de sus habitantes y de ejercer un permanente control sobre los poderes gubernamentales territorianos8 (Ruffini 2001). En 1958 comenzó a publicarse en forma diaria convirtiéndose en el transcurso de la década siguiente en el medio más influyente de la Norpatagonia. En las décadas del setenta y ochenta el Río Negro se transformó en uno de los diarios más importantes a nivel nacional.

Entre las múltiples causas que explican este crecimiento se destacan los estrechos vínculos con los distintos gobiernos provinciales y nacionales que los propietarios del Río Negro supieron forjar a través de los años. En este sentido, la figura de Julio Raúl Rajneri, hijo del fundador del diario, sea quizá la expresión más acabada de esta profunda relación entre prensa y política. A fines de la década del cincuenta y principio de los sesenta fue clara la preferencia del Río Negro por los cuadros políticos de la Unión Cívica Radical del Pueblo, partido en el cual tenía activa participación el diputado provincial Julio Raúl Rajneri (Azcoitia 2013). Luego de un fugaz paso por el gabinete del gobernador radical Carlos Christian Nielsen (1963-1966), Rajneri asumió la dirección del diario en 1967, cargo que abandonó temporalmente en 1986 para volver a la política partidaria al transformarse en Ministro de Educación y Justicia del presidente Raúl Ricardo Alfonsín.

Sobre la posición del diario en torno a las relaciones argentino-chilenas, se puede afirmar que a comienzos de los sesenta su línea editorial apoyaba abiertamente las iniciativas tendientes a promover la integración regional. En este marco, Chile emergía de sus páginas como un país que estaba a la vanguardia de este proceso, contando con una clase política imbuida de un espíritu “americanista” que la impulsaba a subordinar las disputas territoriales al objetivo máximo de la unidad regional (Azcoitia 2013). Frente a diversos incidentes fronterizos que se suscitaron en esos años el Río Negro apeló a los “seculares lazos de amistad”; al “origen común” y al “vital aporte” de los trabajadores chilenos para el desarrollo material norpatagónico, como forma de reinstalar entre sus lectores que el destino del país no se jugaba en la disputa por “pequeñas áreas” sino en la profundización del proceso de integración (Azcoitia 2016).

Tras el golpe de Estado de junio de 1966, se evidenció un cambio en las páginas del diario que se plasmó en la centralidad que los diferendos territoriales fueron adquiriendo en las noticias referidas a la agenda binacional (Azcoitia 2016). Sin embargo, a principios de la década del setenta, durante la dictadura de Alejandro Agustín Lanusse y el gobierno de Salvador Allende, se produjo un acercamiento entre ambos gobiernos que tuvo en el Río Negro a un entusiasta promotor (Azcoitia 2017). El golpe de Estado de 1973 en Chile encontró en el diario rionegrino a un criticó implacable, tanto por el quiebre del orden institucional como por la sistemática violación de los derechos humanos perpetrada por dicha dictadura. A pesar de ello, el Río Negro celebró el encuentro entre Juan Domingo Perón y Augusto Pinochet, destacando la importancia de estrechar los vínculos binacionales, con independencia de las características que pudieran tener los circunstanciales gobiernos. Durante el conflicto por el Beagle el diario rionegrino procuró distanciarse de las posiciones belicistas y antichilenas otorgando espacio en sus páginas a las voces conciliadoras que planteaban la negociación como un imperativo irrenunciable. En su espacio editorial, advertía sobre las impredecibles consecuencias de una guerra a la vez que promovía la mediación papal como salida al conflicto, lo cual finalmente sucedió (Azcoitia 2014).

El lugar de las “sotanas” y “botas” en el nuevo escenario democrático.

Como hemos señalado, a fines de la década del setenta el conflicto por el Beagle incrementó su intensidad. En ese contexto las páginas del Río Negro estuvieron hegemonizadas por enunciadores castrenses y clericales, los cuales desplazaron las voces de referentes partidarios, gremiales y de la sociedad civil hacia zonas marginales de la geografía del diario.9 Esto pudo deberse a que en el contexto de una dictadura cuyo discurso se endurecía apelando a un nacionalismo que abrevaba en ancestrales prejuicios antichilenos, la Iglesia católica emergía como el único actor con la fuerza y el predicamento suficiente para confrontarlo en la escena pública. En este sentido, el Río Negro no sólo dio cuenta de dicha disputa sino que también adoptó una clara posición a favor de este último discurso, en el cual la “hermandad de los pueblos cristianos”, estableciendo un “nosotros” que trascendía las identidades nacionales, se articulaba con la búsqueda de la paz en tanto imperativo irrenunciable (Azcoitia 2014).

Para 1984 la posición de militares y clérigos no difería sustancialmente con respecto a la adoptada en la década anterior, como tampoco la sostenida por el diario rionegrino. Sin embargo, lo que claramente evidenciaban las noticias publicadas por este era el profundo cambio de escenario en el que ahora se inscribía dicho conflicto. En este nuevo marco, las argumentaciones sobre la disputa limítrofe fueron adquiriendo mayor densidad política, en detrimento de las explicaciones jurídicas o cartográficas, a la vez que la relación y la forma en que se constituyeron los distintos enunciadores también varió de manera significativa.

En este sentido, las noticias sobre el acuerdo de paz con Chile, firmado en enero de 1984, propiciaron el despliegue en el Río Negro de un discurso nacionalista que apelaba a una encendida defensa de la soberanía territorial para fundamentar su rechazo al acuerdo. Estos enunciadores construían al gobierno radical como destinatario negativo de su prédica sindicándolo de “traidor” a los intereses de la patria (Verón 1987). En el diario, podía leerse al Almirante retirado Isaac Rojas, conspicuo referente de los sectores militares que a fines de los setenta presionaban públicamente por una salida bélica del conflicto, caracterizando la firma del acuerdo como un acto de “deslealtad” hacia la Argentina. En este sentido se inscribían también las declaraciones de Ricardo Paz, quien fuera canciller durante la última dictadura, lamentando no haber ido a la guerra con Chile en momentos en que “estábamos en condiciones de imponer nuestra razón [...]”. Ya en el marco de las noticias sobre la consulta popular impulsada por el presidente Alfonsín, el General Ramón Camps10advertía a la opinión pública sobre la “osadía de los enemigos de la Nación” a la vez que llamaba a un voto negativo o a la frente a lo que definía como una “política entreguista”11 seguida por el gobierno de Raúl Alfonsín. En este escenario, las palabras del ex presidente de facto Alejandro Agustín Lanusse12 destacando el acuerdo como un paso muy positivo para alcanzar la paz entre “naciones hermanas”, configuraban una voz solitaria dentro de un universo castrense hegemonizado por expresiones que lo calificaban como una “derrota aplastante”, construyendo a Chile como una amenaza que ahora podría “penetrar con soberanía en el Atlántico”.13 La crónica del general Luciano Benjamín Menéndez y su fallido intento por boicotear el acuerdo de Montevideo de 197914 constituyó quizá la expresión más extrema y espectacular de este discurso al que el diario rionegrino le asignaba un carácter fragmentario y marginal, asociado al pasado reciente que se procuraba exorcizar.15 En este sentido, los editoriales del Río Negro brindaban a sus lectores un horizonte de referencias16 en el cual inscribir estas expresiones al dar cuenta de una sociedad “horrorizada”17 por las “abrumadoras pruebas” de un “verdadero genocidio” perpetrado por la “ciega y salvaje represión”18 de la dictadura. Cabe destacar que para el diario, alcanzar un acuerdo con Chile era fundamental, entre otros motivos, porque permitiría cerrar definitivamente el “capítulo del militarismo militante”.19

Por su parte, al igual que en los momentos más álgidos del conflicto, el diario presentaba un discurso clerical que confrontaba con el castrense sosteniendo la imperiosa necesidad de garantizar la paz a través de la inmediata resolución del diferendo en base a la propuesta papal (Azcoitia 2013). En este sentido, el episcopado argentino advertía sobre el peligro de rechazar dicha propuesta afirmando que esta decisión “dejaría una herida de potencial beligerancia en el ánimo nacional [...]”.20 El diario reforzaba esta posición publicando noticias sobre la “satisfacción” que había generado en el Papa la firma del acuerdo, como también con aquellas que daban cuenta de las exhortaciones a la unidad latinoamericana, realizadas por distintos referentes de la Iglesia católica.21 Desde las páginas del diario rionegrino, el cardenal chileno Raúl Silva Henriquez interpelaba a los fieles de ambos países planteando la necesidad de alcanzar la paz y dejar de destinar recursos a gastos que calificaba como inútiles para asignarlos a la “justicia social”.22 En estas palabras resonaban los ecos de la propuesta de desarme que lanzara el presidente Jorge Alessandri23 a fines de la década del cincuenta, la cual contó que el apoyo entusiasta del diario, quien veía en la misma una forma de financiar el ansiado desarrollo económico que requería la región para poder consolidar su sistema democrático (Azcoitia 2013).

Como hemos observado hasta aquí, por las páginas del diario rionegrino se alternaron enunciadores castrenses y eclesiástico asumiendo posiciones claramente enfrentadas en torno al diferendo sobre el Beagle. Donde los primeros articulaban un discurso sobre la base de la “traición”, los “enemigos” y la defensa de la soberanía, los segundos contraponían la “hermandad” y la “unidad” en la “paz”. Sin embargo, en los albores de la democracia el proceso de repolitización de la sociedad argentina demandaba que otros actores dieran muestra de una vitalidad renovada ocupando la centralidad de la escena pública.

El protagonismo de los partidos políticos

Sin lugar a dudas, a lo largo del año 1984 los partidos políticos se constituyeron en los protagonistas de las discusiones en torno al rumbo que debían tomar los acuerdos con Chile. Entre ellos, el radicalismo y el justicialismo fueron los que emergieron como actores principales de la escena informativa. Apenas unos meses antes, en las elecciones presidenciales del 30 octubre de 1983, más del 92 % del electorado había expresado su preferencia por alguna de estas dos fuerzas, confirmando así la vigencia e influencia de la que gozaban en la sociedad argentina.

El triunfo de Raúl Ricardo Alfonsín no sólo significó la clausura definitiva de la alternancia entre gobiernos civiles y militares sino también el quiebre de la hegemonía electoral del peronismo (Quiroga 2005, 84).24 La derrota de esta fuerza que, apelando a la historia, se asumía en campaña como una máquina electoral imbatible, abrió una etapa de profundos debates y reformulaciones internas, la cual tuvo en el acuerdo por el Beagle como otro de sus episodios (Vommaro 2006). En este sentido, el justicialismo fue emergiendo de las páginas del diario rionegrino como el principal adversario político de las propuestas impulsadas por el radicalismo no sin evidenciar profundas diferencias en torno a las posiciones adoptadas por sus principales referentes. Inicialmente, los máximos dirigentes del partido como Ítalo Argentino Lúder, candidato presidencial derrotado en octubre, o María Estala Martínez de Perón, viuda del líder indiscutible del movimiento y presidenta entre los años 1974 y 1976, manifestaron su acuerdo con el contenido del tratado como también con el plebiscito convocado por el ejecutivo nacional, planteando sólo algunos “reparos”.25

Asimismo, un histórico del peronismo como Jorge Taiana enfatizaba la importancia que tenía para el momento actual poder “entendernos con nuestros hermanos…latinoamericanos [...]”. En el contexto de 1984, que el Río Negro caracterizara a Taiana como el ministro de educación que se desempeñó “durante el primer tramo del último gobierno justicialista [...]” y que luego, no sólo fue detenido por la dictadura sino que también fueron confiscados sus bienes, le conferían como enunciador una superioridad moral que potenciaba sus expresiones en favor de un acuerdo con Chile.26 Estas intervenciones se inscribían en una agenda informativa en la que predominaban con claridad los discursos favorables a la negociación y a la creencia de que el diferendo se encontraba en su fase final, tal como se desprendía de las manifestaciones de los distintos agentes estatales a uno y otro lado de la cordillera. Los artículos de opinión publicados por Río Negro representaban un justicialismo acorralado, sin “otra alternativa que apoyar el plebiscito y su resultado” para no quedar estigmatizado como parte del sector belicistas de la sociedad.27

A pesar de ello, a fines del mes de julio podían leerse en el diario los cuestionamientos del Consejo Nacional del partido justicialista en torno a la consulta impulsada por el ejecutivo nacional. Los argumentos desplegados iban desde el rechazo ético a pactar con una dictadura cruenta, como la que encabezaba Augusto Pinochet, hasta la demanda política de utilizar la herramienta de la consultas popular para otros temas sensibles como el pago de la deuda externa y la ley de divorcio, pasando también por las objeciones jurídicas sobre la legalidad de la decisión del poder ejecutivo de realizar dicha convocatoria.28 Pese a construir un discurso que interpelaba al radicalismo en sus propios términos al cuestionar el carácter republicano del mismo, en las páginas del Río Negro los sectores del peronismo que impugnaban el acuerdo quedaron asociados al oscuro período que se intentaba dejar atrás.

Luego de las noticias sobre la estrategia justicialista de bloquear la consulta en el Senado, alegando el carácter “inconstitucional” de la misma, el diario dio cuenta de las iniciativas para conformar un frente opositor cuyas figuras más notorias eran el almirante Isaac Rojas, el general Ramón Camps y el ex candidato a gobernador por el justicialismo, Herminio Iglesias. Este último, referente histórico del peronismo de la provincia de Buenos Aires, había quemado en un acto de campaña un pequeño ataúd cubierto con una bandera radical. Esto fue presentado a la opinión pública como otra manifestación de la Argentina violenta que se pretendía superar, quedando en la memoria colectiva como el hecho decisivo que desencadenó la derrota del justicialismo en el principal distrito electoral de ese país.29 En este sentido, el Río Negro publicó una nota de opinión que establecía la “evidente satisfacción” que había provocado en el gobierno radical la conformación de dicho frente, advirtiendo también sobre la preocupación que despertaba el mismo en la dirigencia justicialista, la cual estaba temerosa de ser arrastrada a “una nueva y estrepitosa derrota electoral[...]”.30 Una vez confirmada la consulta, los diputados peronistas llamaron a abstenerse señalando que el acuerdo vulneraba el principio bioceánico a la vez que propiciaba la “entrega” de las islas sin garantizar un freno a las “pretensiones” chilenas.31

La estrategia discursiva del justicialismo procuraba inscribir el conflicto en un principio interpretativo que contraponían los términos “soberanía” y “entreguismo”, asumiendo para si la defensa del primero a la vez que asignaba el segundo al proyecto oficial. Por su parte, el radicalismo planteaba otro tipo de antagonismo, para el oficialismo lo que confrontaba era un pasado autoritario y violento que se buscaba superar y un futuro democrático y pacífico que el gobierno pretendía encarnar. Lo que estaba en disputa era la capacidad de cada uno de estos discursos políticos de imponer sus propias definiciones sobre la disyuntiva del momento y de ofrecer esquemas de comprensión de los acontecimientos y de las experiencias colectivas (Altamirano 2013, 13).

En este sentido, sin lugar a dudas, la cobertura informativa del Río Negro sobre el trascendental debate televisivo32 en torno a la cuestión del Beagle cristalizó con claridad esta confrontación. El centro de la escena informativa fue ocupado por el canciller Dante Caputo y el presidente del bloque de senadores peronistas, el catamarqueño Vicente Leónidas Saadi, ambos devenidos en imágenes estereotipadas33 construidas para distinguir fácilmente las posiciones en pugna (Amossy y Pierrot 2001, 49). En sus páginas, el Río Negro contraponían la “serenidad”, “fluida dialéctica” y “precisos datos estadísticos” desplegados por el ministro, con la “voz elevada”, las “interrupciones” constantes, la lectura tediosa y el “sinnúmero de denuncias” proferidas por el senador justicialista.

En relación a este último, el diario enfatizó especialmente que hubiera tenido que leer en cada una de sus intervenciones frente a un Caputo que “sólo” volvía a su cuadernillo “para registrar algunas cifras”. Por otro lado, mientras el senador Saadi aclaraba que la disputa no era con Chile sino con el “imperialismo” y que el gobierno había montado una trampa al llevar a la población argentina a firmar un “acta de rendición”, el canciller era representado en el diario como quien “rebatió una a una las posiciones” de su contrincante, constituyéndose así en el claro ganador del debate.34 Toda duda al respecto quedaba disipada para los lectores del Río Negro luego de que este publicara las palabras de un integrante del comando superior justicialista quien afirmaba: “Hemos quemado un ataúd por segunda vez consecutiva ante las cámaras de televisión”,35 en clara alusión a la acción de Herminio Iglesias que mencionamos anteriormente. La propia Isabel Perón se expresaba en esta línea al criticar la postura adoptada por el senador Saadi a la vez que explicitaba su apoyo a la decisión adoptada por el gobierno de Alfonsín.36

En su espacio editorial, el Río Negro presentó el debate como la confrontación entre dos concepciones políticas antagónicas, una arcaica encarnada por el senador, pero que el diario establecía como la predominante en el justicialismo, y otra moderna simbolizada en la vitalidad y capacidad del ministro de Relaciones Exteriores y Culto del gobierno de Alfonsín. Desde esta perspectiva, las banderas históricas del justicialismo habían encontrado en el partido radical una expresión más renovada y compleja, lo que condenaba al movimiento creado en torno a la figura de Juan Domingo Perón a convertirse en una fuerza conservadora o a quedar absorbido por el partido de gobierno.37

Para el diario el verdadero debate excedía la discusión en torno a los límites de un canal, lo que se estaba dirimiendo en realidad era el futuro mismo del sistema político argentino. A pesar de ser crítico con el radicalismo por considerar que estaba haciendo una utilización política de la cuestión, el Río Negro aplicaba un criterio diferente al analizar la forma en que el resultado de la consulta podría impactar en el futuro del justicialismo. Mientras que en el caso del primero el diario advertía que una victoria del “si” no debería interpretarse como un apoyo a su gestión, en el caso del segundo no dudaba en afirmar que el mismo resultado no sólo implicaría la superación del militarismo predominante durante el período anterior sino también la del partido sobre el que se había estructurado la vida política argentina desde 1945.38

Ante la inminencia de la consulta popular, el diario no trepidó en afirmar que los grupos que se oponían al acuerdo, entre los que identificaba a “los derechistas del peronismo, la extrema derecha nacionalista clerical,…conservadorismo tradicionalista [...]” y sectores de la izquierda, compartían “la emotividad irracional…que caracterizó al fascismo europeo [...]”.39 Se evidenciaba así la estrategia del diario de neutralizar esta posición a través de la producción y transmisión de una imagen negativa y deslegitimadora de la misma (Martín Rojo 1997, 16). En el marco de una democracia occidental de comienzos de la década del ochenta, la cual a su vez retornaba luego de siete años de una cruenta dictadura, cuesta encontrar un término con una carga semántica más negativo que el de “fascista”. Su utilización tenía como objetivo situar al “otro” por fuera del sistema de valores compartidos por esa sociedad.

En la misma página en la que exhortaba a sus lectores a “Votar contra el fascismo”, el diario publicó una nota de opinión en la que se cuestionaba al justicialismo por impulsar la abstención frente al plebiscito. Exhumando fragmentos de discursos de Perón en los que enfatizaba la importancia de la integración afirmando que los chilenos eran compatriotas y que la islas del Beagle debían considerarse simplemente como “peñascos sin valor”, la nota del diario pretendía confrontar a los justicialistas con su propio pasado señalándoles sus contradicciones en relación a la palabra que era principio y final de la doctrina que profesaban.40 Ilustraba la nota una amplia foto en la que Juan Domingo Perón y el presidente chileno Ibañez del Campo (1952-1958) se confundían en un fraternal abrazo.

El radicalismo, entre la paz y la elección permanente

El contundente triunfo electoral de 1983 vigorizó la construcción de un discurso que situaba al radicalismo como único intérprete de una sociedad que demandaba el comienzo de una etapa refundacional, llamada a saldar las deudas de un pasado violento e intolerante. El denominado “discurso alfonsinista” logró imprimirle un sentido y orientación a las esperanzas y temores de vastos sectores de la ciudadanía, estableciendo en la antinomia democracia-autoritarismo un límite entre lo legítimo y lo ilegítimo del cual ni los propios adversarios pudieron abstraerse (Altamirano 2013,13).

En lo referido a la cuestión del canal Beagle, el discurso oficial optó por desplazar el sentido nacionalista territorial que le imprimió la dictadura para situar el conflicto como parte de la oprobiosa herencia castrense que el radicalismo se proponía clausurar (Azcoitia 2014). En palabras del canciller Dante Caputo, la relación con Chile debía ingresar en una nueva etapa donde la “confrontación” del pasado diera paso a la “cooperación”. El funcionario enmarcaba este cambio en la importancia que había adquirido la paz para la sociedad argentina luego de la guerra de 1982.41 Con las heridas aún abiertas de la represión clandestina y de la derrota de Malvinas, la paz configuraba el nuevo “imperativo histórico” invocado por el gobierno argentino. A pesar de ello, el radicalismo debió asegurar a la opinión pública que el acuerdo no vulneraba el “principio bioceánico”,42 el cual había devenido en un fetiche cuya sola mención parecía aplacar las conciencias nacionalistas.43 Este constituyó uno de los nudos sobre los que se estructuró parte del debate público en torno a la delimitación del canal. Para sus detractores el acuerdo con Chile violaba este principio al permitir que Chile accediera al Atlántico, mientras que para sus defensores lo resguardaba al establecer límites precisos y descartando las fórmulas de soberanía conjunta.

A lo largo de esos meses de intensas discusiones en torno al Beagle, circularon por la geografía del diario numerosos referentes del partido radical argumentando en favor del acuerdo. Sin embargo, al oficializarse la convocatoria a la consulta popular impulsada por el gobierno, las noticias publicadas por el Río Negro evidenciaron el creciente protagonismo que comenzaba a adquirir la figura de Raúl Alfonsín. Sin lugar a dudas, el presidente fue quien asumió el liderazgo indiscutible de la campaña por el “si” con un discurso que articulaba aspectos rupturistas junto con otros que recuperaban conceptos y un lenguaje que abrevaba en las tradiciones antiimperialistas contenidas en los partidos mayoritarios de la Argentina. En este sentido, Gerardo Aboy Carlés sostiene que las interpretaciones dicotómicas de la política en las que se contraponían justicia social o minorías privilegiadas; liberación o dependencia; pueblo o antipueblo, conservaban gran influencia en vastos sectores del partido durante los primeros años de gestión radical (Aboy Carles 2010).

En su narrativa, el presidente Alfonsín desmarcaba la cuestión del Beagle de la disputa por la soberanía para inscribirla en otra trama de sentidos, la cual se articulaba en torno al proceso de integración regional. Desde esta perspectiva, lo que la resolución del diferendo ponía en juego no era simplemente el control sobre un territorio sino la posibilidad misma de alcanzar la “unidad latinoamericana”, condición necesaria para “recuperar la dignidad de sus habitantes”.44 De esta manera, el presidente argentino elegía no antagonizar con Chile sino con los países del “norte desarrollado”, a los que sindicaba como responsables de ser “quienes desde afuera siempre pretenden que los estados americanos sigamos siendo estados desunidos de América Latina [...].45 Evidenciando marcas de la teoría de la dependencia en su discurso, advertía que el bienestar de los países del norte no debía “ser resultado de la marginalidad de los del sur”.46

Constituido en un enunciador didáctico, el presidente argentino explicaba a la opinión pública que la cuestión del Beagle era de una naturaleza distinta al conflicto de las islas Malvinas, de las cuales efectivamente habíamos sido “despojados” por una potencia extranjera. Para Alfonsín, el diferendo con Chile se asemejaba en realidad a la división de una propiedad que sobreviene tras la muerte de un padre. En esa situación “cada uno de los hijos tiene una idea aproximada de lo que le correspondía pero no había una delimitación exacta [...]”.47 A través de esta metáfora, no sólo recuperaba la noción de hermandad entre los pueblos y la evocación a los “padres fundadores de la patria”, sino también establecía con sutileza que cualquiera fuera el resultado ninguna de las partes resignaría su soberanía ya que nunca la habían establecido con precisión. De esta forma, la decisión que otorgaba las islas Picton, Lenox y Nueva a Chile no constituiría otra manifestación del sempiterno expansionismo transandino, como sostenía el discurso nacionalista territorial, sino la simple fijación de límites, en un espacio sobre el cual ambos países tenían “pretensiones” pero ningún derecho adquirido.

Para dirimir este conflicto el presidente optó por el plebiscito, el cual convirtió en la cristalización de todo lo que el radicalismo pretendía simbolizar en tanto cambio de época. Interpelando a los ciudadanos como entidad colectiva en la que también se inscribía el enunciador, el presidente afirmaba que “hemos de decidir entre todos [...] si privilegiamos por encima de todo la paz y la integración…cumpliendo el sueño trunco de los libertadores [...]”.48 En su discurso, Alfonsín contraponía la voluntad popular a la imposición de una junta militar; la razón argumental a las pasiones, concebidas como antesala de la violencia; la “paz”, en tanto estado natural de las democracias, a la pulsión bélica de las dictaduras; y, finalmente, la recuperación del proyecto independentista a través de cooperación con los “pueblos hermanos” al conflicto funcional a la balcanización impulsada por el imperialismo.

Bajo el título “El gobierno informa al pueblo”, el diario rionegrino publicó una publicidad de la Secretaría de Información Pública que, apelando al pragmatismo económico de los lectores, describía a las islas Picton, Nueva y Lennox desde sus carencias para justificar la inutilidad de disputar su soberanía. Se señalaba allí que la tierra era “escasa”, la vegetación “rala”, “no existe riqueza mineral considerable”, los estudios geológicos “tampoco” indicaban la presencia de petróleo, además de ser “poca gente” la que vivía en estas islas donde lo único que se presenta en términos de abundancia eran sus “formaciones rocosas”. En el cierre, se apelaba a una expresión imperativa que evocaba al origen mítico de la voluntad popular en la Argentina: “El pueblo debe saber de qué se trata”. En la historia escolar impartida en ese país la expresión “el pueblo quiere saber de qué se trata”, atribuida a la muchedumbre reunida frente al Cabildo de Buenos Aires, le imprimió un sentido democrático a las jornadas acaecidas en el mes de mayo de 1810 que derivaron en la destitución del virrey y su reemplazo por una junta de gobierno. En este sentido cabe recordar que el propio Alfonsín eligió el balcón de ese mismo Cabildo como escenario de su primer discurso presidencial en una clara apelación simbólica a ese momento “fundacional” de la Nación argentina.

Frente a la estrategia desplegada por el radicalismo durante el plebiscito, el Río Negro adoptó una postura ambivalente. Si bien desde su espacio editorial respaldó plenamente la consulta popular y el acuerdo impulsado por el gobierno, al mismo tiempo se erigió en un crítico enfático de lo que interpretaba como un uso partidista del tema. En este sentido, advertía que el intento de Alfonsín de revitalizar su gestión recreando el clima electoral que había permitido el triunfo de 1983 conllevaba el riesgo de subsumir el plebiscito a la popularidad de un gobierno conducido por un jefe de Estado “algo compulsivo”.49 Pese a los históricos vínculos que ligaban a la familia Rajneri con la Unión Cívica Radical (Azcoitia 2013; Camino Vela 2013), el Río Negro sostenía que la cuestión de fondo era votar a favor de “una política de paz y convivencia” que mantuviera “el respeto a las decisiones jurídicas y a los tratados internacionales”50 y no de apoyar a un gobierno con pretensiones populistas.51 Cabe recordar que al comienzo de su gestión, Raúl Alfonsín intentó articular una “nueva tradición” política que fuera capaz de incorporar la historia del peronismo (Vommaro 2006, 257). En este marco, sectores cercanos al presidente habían manifestado abiertamente su intención de que la experiencia alfonsinista se constituyera en la “tercera etapa del movimiento nacional”, estableciendo así una continuidad con los gobiernos de Hipólito Yrigoyen y Juan Domingo Perón (Aboy Carles 2010). Para el Río Negro este tipo de aspiraciones conformaban los “ritos o tabúes ideológicos”52 que impedían al radicalismo adoptar con convicción un programa económico tendiente a alcanzar “el objetivo superior de la producción para aumentar la riqueza” ante el “estrepitoso” fracaso de su “keinesianismo”.53 Desde esta perspectiva, las “ideas” dominantes durante el último medio siglo, que habían transformado al país de “uno de los más prósperos del planeta” en un “mendicante” del tercer mundo, tenían en el peronismo a su máxima expresión pero no la única. Para Río Negro la posibilidad de que se conformara en torno al radicalismo un “tercer movimiento histórico” no sería una respuesta a la profunda crisis por la que atravesaba el país sino un “síntoma” de la misma.54

En este sentido, no resulta extraño que el nombramiento de Julio Rajneri como Ministro de Educación y Justicia del gobierno de Alfonsín se produjera en 1986, año en el cual las ideas de constituir dicho movimiento habían sido desplazadas definitivamente por las de conformar una “Segunda República”, la cual condensaba la aspiración del radicalismo de regenerar a los actores de la vida política argentina y a superar el faccionalismo hegemonista que la había caracterizado a lo largo del siglo veinte. Entre sus principales iniciativas, además de la reforma constitucional y el establecimiento de un régimen semiparlamentario, se encontraba el traslado de la capital del país hacia la provincia de Río Negro.55

La Norpatagonia como escena de enunciación

En la región, los comicios de 1983 fueron testigos del triunfo de fuerzas políticas con una dilatada tradición provincial. En Río Negro, el ex gobernador peronista Mario Franco, quien era el favorito para ganar las elecciones, acabó sucumbiendo ante el radical Osvaldo Álvarez Guerrero (1983-1987), claramente beneficiado por el arrasador triunfo alfonsinista a nivel nacional (Camino Vela 2013). Por su parte, la provincia de Neuquén no deparó grande sorpresas. El triunfo del histórico dirigente Felipe Sapag evidenció la vigencia del Movimiento Popular Neuquino, el cual retornó a la senda de éxitos electorales iniciada en 1963 e interrumpida sólo por los gobiernos de facto (Navarro Floria y Nicoletti 2014).

En las páginas del Río Negro, la Norpatagonia se constituyó en un escenario informativo hegemonizado por noticias que expresaban su apoyo al acuerdo con Chile. En ellas podía verse a referentes de los distintos espacios políticos de las provincias de Río Negro y Neuquén exhortando a sus seguidores a votar por la propuesta que impulsaba el ejecutivo nacional. Ni siquiera el justicialismo, el cual también era oposición en ambas provincias, permaneció ajeno a este consenso que parecía recortarse de las páginas del diario. En la ciudad neuquina de San Martín de los Andes, el partido fundado por Juan Domingo Perón llamaba a optar por un “si crítico”, afirmando que el “enemigo” no era el pueblo chileno sino su “oligarquía y el imperialismo”. En la misma línea, los justicialistas rionegrinos de Bariloche defendían el voto afirmativo sosteniendo que “estamos más cerca de Chile con el sí que con el no [...]”.56 Pese a que, como hemos mencionado, la conducción del partido impulsaba la campaña por la abstención a nivel nacional, con la proximidad de la cordillera el discurso justicialista que circulaba por el diario rionegrino parecía impregnarse del denso entramado de relaciones que histórica y cotidianamente vinculaban a Chile con la región.

Por su parte, tanto el Comité de Solidaridad con Chile como el Equipo Parroquial del Inmigrante “instaban” a los chilenos residentes en la Norpatagonia a votar en favor de la propuesta impulsada por el gobierno nacional, la cual, desde esta perspectiva, contribuiría a mantener la paz entre “pueblos hermanos”.57 En este sentido, cabe señalar una doble particularidad de la región en cuestión. Por un lado, la notable incidencia de la migración trasandina, al punto de convertirla en un actor a interpelar para que interviniera en el plebiscito. Por el otro, la impronta de la influyente Iglesia norpatagónica, la cual sostenía desde la década del sesenta un compromiso activo y público con la defensa de los derechos humanos y la integración latinoamericana. Los obispos Jaime De Nevares y Miguel Hesayne, por las diócesis de Neuquén y Río Negro respectivamente, fueron artífices de numerosas iniciativas en este sentido, entre las que se destacan la creación de pastorales de migraciones y la realización de encuentros binacionales de obispos argentinos y chilenos (Barelli y Azcoitia 2015; Nicoletti 2002).

La denuncia de los atroces delitos perpetrados allende la cordillera constituyó otro horizonte de referencias para interpretar lo que estaba en disputa en ese plebiscito. Entrevistado en la ciudad rionegrino de Cipolletti, el ex diputado chileno Luis Guastavino sostenía que el conflicto en el extremo sur era funcional al dictador Augusto Pinochet porque operaba como “elemento de cohesión” de las Fuerzas Armadas de su país.58 Con el desarrollo de las Jornadas por la Paz y la Libertad en Chile como escenario, el comité de solidaridad con Chile Pablo Neruda establecía “la unidad latinoamericana” como paso “fundamental para la democracia”, concluyendo luego que su país necesitaba de dicha unidad para poder enfrentar al imperialismo.59 Desde esta perspectiva, el plebiscito no definiría sólo la soberanía estatal sobre islas y mares sino también, y fundamentalmente, el curso del proceso de democratización que comenzaba a atravesar el sistema político del cono sur.

En cuanto a los oficialismo de la región, las noticias sobre el cierre de campaña del “si” destacaban la presencia y el compromiso de los gobernadores de ambas provincias. En este sentido, los máximos dirigentes de Río Negro y Neuquén suscribieron un documento en el que exhortaban a la población a “defender la democracia, la paz, la integración económica con Chile y la unidad latinoamericana [...]”. En esa misma nota, Álvarez Guerrero60 evocaba a los caídos en la guerra de Malvinas atribuyéndoles a sus muertes un “mensaje de pacificación, libertad y unión americana”.61 Asimismo, es importante señalar que la argumentación del gobernador rionegrino en defensa del acuerdo no sólo apelaba a valores como la paz, la democracia y la unidad sino también recorría otras aspectos de los que, a su entender, se ponían en juego para la región. Su discurso integraba la lectura política y económica del acuerdo, planteando que el voto afirmativo no sólo implicaría la derrota definitiva de la “reacción antidemocrática” sino también permitiría “garantizar el progreso de nuestros pueblos” al “abrir el mundo del Pacífico a nuestras exportaciones”.62En referencia a la vital importancia que la fuerza de trabajo chilena tenía para el funcionamiento de la economía patagónica, Álvarez Guerrero llamaba a “decirle si [...] a la paz con nuestros hermanos chilenos que trabajan codo a codo con nosotros [...]”.63

En el mismo sentido se había pronunciado orgánicamente la convención del Movimiento Popular Neuquino. En el documento publicado por el diario en forma fragmentaria, el partido llamaba a “asegurar el bien supremo de la paz” luego de recorrer por diversos tópicos como “la hermandad” entre los pueblos; la línea “histórica y cultural” compartida, el “fraterno sentimiento cristiano” y la necesidad de alcanzar la “unidad iberoamericana”. En su discurso, la Norpatagonia se potenciaría con los acuerdos al formar parte de una “nueva estrategia geopolítica” tendiente a impulsar la conformación de “ejes de desarrollo este-oeste que unirán el Atlántico con el Pacífico” los cuales promoverían “el bienestar y la felicidad de su pueblo, contribuyendo a la grandeza de la Nación y aventando el apetito de potencias colonialistas”.64 De esta forma, en la región se conjugaban los profundo vínculos de fraternidad con Chile, la potencialidad económica del comercio bioceánico y la definición de una estrategia antiimperialista. El plebiscito se tornaba así en un momento decisivo en el presente y futuro de la Norpatagonia, de la Argentina y de Latinoamérica.

Finalmente el 25 de noviembre de 1984 se realizó el plebiscito dando como resultado un contundente apoyo en favor del acuerdo limítrofe con Chile. Al día siguiente, el triunfo del “Si” en el referéndum constituyó la noticia excluyente de la prensa argentina. El principal título de tapa del Río Negro fue el “Abrumador respaldo al Si” obtenido en todo el país. Consecuente con lo sostenido en su espacio editorial, el diario rionegrino se encargó de aclarar que el apoyo tenía como única destinataria la “propuesta papal de Juan Pablo II”.65 En las noticias sobre el plebiscito en Río Negro y Neuquén hacía especial hincapié en la masividad de la concurrencia como en los porcentajes alcanzados por el “Si”, los cuales superaban a la media nacional.66 Los grandes titulares y el tono de las notas evidenciaban el sentimiento de triunfo que embargaba al diario que se había asumido como promotor infatigable del acuerdo.

Conclusiones

La derrota en la guerra de Malvinas (1982) y el retorno de la democracia (1983) generaron profundos cambios en la Argentina los cuales se evidenciaron en la producción y circulación del discurso público en torno al canal Beagle. Esto se plasmó en el diario Río Negro tanto en el desplazamiento de los discursos nacionalistas territoriales, los cuales fueron marginados de la escena informativa en favor de aquellos que alentaron la resolución definitiva del conflicto en tanto forma de alcanzar la paz y la integración regional, como en la emergencia de los partidos políticos en tanto actores centrales del debate público.

En el marco de las noticias sobre el plebiscito, se destacó en el diario Río Negro la figura del presidente Raúl Alfonsín, quien en su discurso en defensa del acuerdo con Chile conjugó elementos de ruptura con el pasado junto con la apelación a las tradiciones americanistas en las que, históricamente, abrevaron los partidos populares de la Argentina. Si bien algunos de los sectores que antagonizaron con la posición del gobierno también argumentaron desde una matriz antiimperialista, el esquema interpretativo que prevaleció en las páginas del diario, basado en el binarismo paz-guerra, acabó situándolos junto a los enunciadores castrenses como expresión de un pasado oprobioso que pretendía superarse. Esto último resultó por demás claro en el caso del justicialismo, partido que para el Río Negro constituía un obstáculo para la refundación política y económica que la Argentina debía comenzar a transitar.

Por este motivo, los editoriales del diario rionegrino se cuidaban en señalar que el triunfo del acuerdo con Chile debía leerse como una victoria de la paz y la mediación vaticana y no del gobierno alfonsinista. A pesar de los históricos vínculos entre la familia Rajneri y el radicalismo, la dirección del diario temía que el triunfo de la posición sostenida por el gobierno estimulara a los sectores que impulsaban la conformación del Tercer Movimiento Histórico.

En las páginas del diario rionegrino la Norpatagonia emergió con un discurso homogéneo en apoyo al acuerdo en el que confluyeron desde la clase dirigente provincial hasta las organizaciones vinculadas con los emigrantes y exiliados chilenos. Los argumentos transitaron desde las históricas apelaciones a la fraternidad argentino-chilena hasta los planteos de naturaleza económica, señalando la necesidad de mantener el flujo migratorio junto con las ventajas de la integración y el comercio con el pacífico.

Es importante destacar que el abrumador triunfo del “si” en el plebiscito de 1984 clausuró definitivamente una época de la historia binacional dominada por las hipótesis de conflicto castrenses. El diario rionegrino celebró este resultado, enfatizando en sus titulares y notas que en las provincias de Río Negro y Neuquén el porcentaje de participación y de votos positivos superaba con holgura la media nacional. El nuevo escenario abierto con el retorno de la democracia en la Argentina permitió que las tensiones fronterizas dieran paso a la cooperación entre los Estados, tendencia que se profundizó a partir de 1990 con el fin de la dictadura allende la cordillera.

Referencias

Aboy Carles, Gerardo. 2010. "Raúl Alfonsín y la fundación de la Segunda República". En Discutir Alfonsín, comp., Roberto Gargarella, María Victoria Murillo & Mario Pecheny, 67-84. Buenos Aires: Siglo XXI.

Amossy, Ruth y Herschberg Pierrot. 2001. Estereotipos y clichés. Buenos Aires: Eudeba.

Angenot, Marc. 2010. El discurso social. Buenos Aires: Siglo XXI .

Azcoitia Alfredo. 2013. “El diario Río Negro (General Roca) y las representaciones sobre Chile durante los primeros años de la provincia: una trama multiescalar”. Pilquen. 16:1-11

Azcoitia, Alfredo. 2014. “El diario Rio Negro y la representación de "lo chileno" durante el conflicto del Beagle (1977-1978)”. REHIME. 07:50-71. http://www.rehime.com.ar/escritos/dossier/07prensaprov/dossier07-prensaprov-02.pdf [Link]

Azcoitia, Alfredo. 2014. “La fuga del penal de Rawson y los fusilamientos de Trelew según el diario Río Negro: tensiones políticas y operaciones discursivas”. Historia Caribe. 9 (25):181-213

Azcoitia, Alfredo. 2016. “Las representaciones sobre las relaciones argentino-chilenas en la prensa norpatagónica. Un análisis del diario Río Negro (1960-1984)”. Tesis doctoral, Universidad Nacional del Sur.

Azcoitia, Alfredo. 2017. “Argentina frente al gobierno de Allende, la mirada del diario Río Negro”. Estudios Fronterizos. 18 (36): 102-125.

Barelli Ana Inés y Alfredo Azcoitia. 2015. “Construcciones identitarias hegemónicas y estrategias socio-religiosas de visibilización de los migrantes latinoamericanos en San Carlos de Bariloche (1970-2000)”. Quinto Sol. 19 (2): 1-21.

Battaglino, Jorge. 2013. “La Argentina desde 1983: un caso de desmilitarización del sistema político” Revista SAAP.7:265-273. http://www.scielo.org.ar/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1853-19702013000200004&lng=es&tlng=es.[Link]

Bohoslavsky, Ernesto. 2009. El complot patagónico. Nación, conspiracionismo y violencia en el sur de Argentina y Chile (siglos XIX y XX). Buenos Aires: Prometeo.

Borrat, Héctor. 1989. El periódico, actor político. Barcelona: Gustavo Pili.

Calsamiglia Blancafort, Helena y Tusón Valls Amparo. 1999. Las cosas del decir. Manual de análisis del discurso. Barcelona: Ariel.

Camino Vela, Francisco. 2013. “La dinámica política en la Provincia de Río Negro (Argentina) desde mediados del siglo XX: el predominio de la Unión Cívica Radical”. Tesis doctoral, Universidad de Sevilla.

Chouliaraki, Lilie y Fariclough Norman. 1999. Discourse in Late Modernity Rethinking Critical Discourse Analysis. Edinburgh-Cambridge, Edinburgh University Press.

Cisneros Andrés y Carlos Escudé. 2000. Historia general de las Relaciones Exteriores de la República Argentina (1806-1989). Buenos Aires: Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales, http://www.argentina-rree.com/historia.htm.[Link]

Gomes, Gabriela. 2013. “Las trayectorias políticas de los funcionarios nacional-corporativistas del Onganiato”. Ponencia presentada en las Jornada Recuperando trayectorias intelectuales en el Estado. Argentina en la segunda mitad del siglo XX, en Buenos Aires. Argentina.

Lacoste, Pablo. 2005. “Argentina y Chile (1810-2000)”. En Argentina Chile y sus vecinos. Tomo I, comp. Pablo Lacoste, 29-91. Mendoza: Caviar Blue.

Lesgart, Cecilia. 2003. Uso de la transición a la democracia. Ensayo, ciencia y política en la década del 80. Rosario: Homo Sapiens.

Maingueneu, Dominique y Patrick Charaudeau. 2005. Diccionario de análisis del discurso. Buenos Aires: Amorrortu editores.

Manzano Iturra y Karen Isabel. 2014. “Arbitraje y mediación. Los medios jurídicos tras el conflicto del Beagle”. Revista de Historia Americana y Argentina. 49 (1): 47-64.

Martín Rojo, Luisa. 1997. “El orden social de los discursos”. Discurso. 21/22: 1-37.

Martini, Stella. 2000. Periodismo, noticia y noticiabilidad. Buenos Aires: Norma.

Medina Valverde, Christian. 2004. “Chile y la integración latinoamericana: política exterior, acción diplomática y opinión pública, 1960-1976”. Tesis Doctoral, Universidad Complutense de Madrid.

Navarro Floria, Pedro y María Andrea Nicoletti. 2014. Historia del Neuquén. Neuquén: Euduco.

Nicoletti, María Andrea. 2002. “El obispo de Nevares y la Pastoral de Migraciones: la defensa de los derechos humanos de los migrantes chilenos (1973-1990)”. RET. 7:181-204.

Quiroga, Hugo. 2005. “El tiempo del proceso”. En Dictadura y democracia. (1976-2001). Nueva Historia. Tomo X, dir., Juan Suriano, 33-86. Buenos Aires: Sudamericana.

Rapoport, Mario. 2005. Historia económica, política y social de la Argentina (1880-2003). Buenos Aires: Ariel.

Río Negro. 1979. “El general Sasiaiñ ordenó el repliegue de efectivos militares concentrados en Junín y Bariloche”. General Roca, enero 29.

Río Negro. 1984. “La exhumación del proceso”. General Roca, enero 4.

Río Negro. 1984. “Beagle: El acuerdo será para los próximos meses”. General Roca, enero 5.

Río Negro. 1984. “¿Quién sembró de cadáveres la Argentina”. General Roca, enero 18.

Río Negro. 1984. “Caputo viajó ayer hacia el Vaticano”. General Roca, enero 22.

Río Negro. 1984. “Favorable acogida tuvo el compromiso conjunto”. General Roca, enero 24.

Río Negro. 1984. “Al diablo con las ideologías”. General Roca, marzo 11.

Río Negro. 1984. “Investigan declaraciones de Menéndez sobre Beagle”. General Roca, julio 8.

Río Negro. 1984. “La solución por el Beagle está cerca dijo Silva Henriquez”. General Roca, julio 10.

Río Negro. 1984. “No habrá independencia si el continente se divide”. General Roca, julio 25.

Río Negro. 1984. “Habrá consulta popular por el Beagle, anunció Alfonsín”. General Roca, julio 26.

Río Negro. 1984. “Consulta popular 30 días después de conocida la propuesta del papa”. General Roca, julio 26.

Río Negro. 1984. “Mayoría en favor de la consulta popular sobre la propuesta papal”. General Roca, julio 27.

Río Negro. 1984. “Lúder no se opone y Bittel dice que la decisión “es la correcta”. General Roca, julio 27.

Río Negro. 1984. “Un riesgo calculado”. General Roca, julio 27.

Río Negro. 1984. “¿Por la paz o por la guerra?”. General Roca, julio 30.

Río Negro. 1984. “Proyecto de diputados el PJ para un referéndum por el Beagle y la deuda”. General Roca, agosto 4.

Río Negro. 1984. “¿Iniciativa improvisada?”. General Roca, agosto 6.

Río Negro. 1984. “El episcopado respaldó la convocatoria por el Beagle”. General Roca, agosto 9.

Río Negro. 1984. “Beagle: respalda la Iglesia una solución pacífica”. General Roca, agosto 9.

Río Negro. 1984. “Alfonsín reiteró su respaldo a la unidad latinoamericana”. General Roca, agosto 10.

Río Negro. 1984. “Disconformidad en la consulta convocada sobre la cuestión del Beagle”. General Roca, agosto 11.

Río Negro. 1984. “Camps se opone”. General Roca, agosto 19.

Río Negro. 1984. “Esperando la propuesta papal”. General Roca, agosto 19.

Río Negro. 1984. “A Pinochet habrá que echarlo” afirmó un ex-diputado chileno”. General Roca, agosto 20.

Río Negro. 1984. “Discrepancias entre miembros del Congreso”. General Roca, octubre 21.

Río Negro. 1984. “Conclusiones de las jornadas por la paz y la libertad en Chile”. General Roca, agosto 22.

Río Negro. 1984. “Taiana destacó la necesidad de un acuerdo”. General Roca, agosto 24.

Río Negro. 1984. “El naufragio del peronismo”. General Roca, octubre 2.

Río Negro. 1984. “El justicialismo analiza el diferendo”. General Roca, octubre 7.

Río Negro. 1984. “El papa propone una gran patria latinoamericana”. General Roca, octubre 13.

Río Negro. 1984. “Álvarez Guerrero se refirió al acuerdo por el Beagle”. General Roca, octubre 16.

Río Negro. 1984. “Encontradas posiciones de ex jefes militares”. General Roca, octubre 21.

Río Negro. 1984. “El MPN a favor del acuerdo por el Beagle”. General Roca, noviembre 11.

Río Negro. 1984. “Fue desordenado el debate por el Beagle”. General Roca, noviembre 16.

Río Negro. 1984. “Caputo y Saadi debatieron sobre el Beagle”. General Roca, noviembre 16.

Río Negro. 1984. “Amplia repercusión tuvo el debate en torno al Beagle”. General Roca, noviembre 17.

Río Negro. 1984. “La identidad radical”. General Roca, noviembre 18.

Río Negro. 1984. “Medidas del MPN para la consulta por el Beagle”. General Roca, noviembre 18.

Río Negro. 1984. “Pasado y Futuro”. General Roca, noviembre 20.

Río Negro. 1984. “Alfonsín defendió el acuerdo y criticó el abstencionismo”. General Roca, noviembre 22.

Río Negro. 1984. “Beagle: Alfonsín defendió el acuerdo con Chile”. General Roca, noviembre 22.

Río Negro. 1984. “Isabel Perón criticó a Saadi y apoyó al gobierno”. General Roca, noviembre 22.

Río Negro. 1984. “La abstención favorecerá a los partidarios de la dictadura”. General Roca, noviembre 22.

Río Negro. 1984. “Instan a inmigrantes a votar por el “si”. General Roca, noviembre 22

Río Negro. 1984. “Perón en 1953 'Consigna de honor nacional'”. General Roca, noviembre 23.

Río Negro. 1984. “Votar contra el fascismo”. General Roca, noviembre 23.

Río Negro. 1984. “Alfonsín criticó la discriminación a América Latina”. General Roca, noviembre 23.

Río Negro. 1984. “Suscribieron un documento por el voto afirmativo”. General Roca, noviembre 24.

Río Negro. 1984. “Se realizó en Roca el acto por la consulta”. General Roca, noviembre 24.

Río Negro. 1984. “Masiva afluencia en Río Negro y Neuquén”. General Roca, noviembre 26.

Río Negro. 1984. “Masivo apoyo al acuerdo con Chile”. General Roca, noviembre 26.

Río Negro. 1984. “Abrumador respaldo al Si”. General Roca, noviembre 26.

Río Negro. 1984. “La ciudadanía rionegrina se pronunció masivamente por el si”. General Roca, noviembre 26.

Rodríguez, Jesús. 2011. El caso Chile. La guerra Fría y la influencia argentina en la transición democrática. Buenos Aires: Capital Intelectual.

Ruffini, Martha. 2001. “Autoridad, legitimidad y representaciones políticas. Juegos y estrategias de una empresa perdurable: Río Negro y La Nueva Era (1904-1930)”. En Pasiones sureñas. Prensa, cultura y política en la frontera norpatagónica (1884-1946) , dir., Leticia Prislei, 101-126. Buenos Aires: Entrepasados, Prometeo.

Ruffini, Martha. 2007. La pervivencia de la República posible en los territorios nacionales. Poder y ciudadanía en Río Negro. Buenos Aires: Universidad Nacional de Quilmes.

Russell, Roberto y Mónica Hirst. 1987. Democracia y política exterior: los casos de Argentina y Brasil. Buenos Aires: Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales.

Verón, Eliseo. 1987. “La palabra adversativa. Observaciones sobre la enunciación política”. En El discurso político, Eliseo Verón, et al, 13-26. Buenos Aires: Ediciones Hachette.

Villegas, Osiris Guillermo. 1969. Políticas y estrategias para el desarrollo y la Seguridad Nacional. Buenos Aires: Pleamar.

Vommaro, Gabriel. 2006. “Cuando el pasado es superado por el presente: las elecciones presidenciales de 1983 y la construcción de un nuevo tiempo político en la Argentina”. En Los años de Alfonsín ¿El poder de la democracia o la democracia del poder?, coord., Alfredo Raúl Pucciarelli. Buenos Aires: Siglo XXI.

Es importan señalar que durante la dictadura de Onganía, el general Osiris Villegas se desempeñó como secretario general del Consejo Nacional de Seguridad. A partir de su obra Guerra Revolucionaria comunista (1960), por la que recibió el primer premio de la Comisión de Cultura del Círculo Militar Argentino, fue conocido como el “ideólogo” del anticomunismo de las Fuerzas Armadas (Gomes 2011).
Osiris Villegas definía al colectivo de migrantes chilenos como “indeseable” atribuyéndoles problemas de salud, analfabetismo y baja calificación laboral (Villegas 1969). Es importan señalar que durante la dictadura de Onganía, el general Osiris Villegas se desempeñó como secretario general del Consejo Nacional de Seguridad. A partir de su obra Guerra Revolucionaria comunista (1960), por la que recibió el primer premio de la Comisión de Cultura del Círculo Militar Argentino, fue conocido como el “ideólogo” del anticomunismo de las Fuerzas Armadas (Gomes 2011).
Río Negro. 1979. “El general Sasiaiñ ordenó el repliegue de efectivos militares concentrados en Junín y Bariloche”. General Roca, enero 29.
Los otros dos temas que tensaban las relaciones entre ambos países eran la decisión de la dictadura chilena de reanudar los vínculos comerciales con las islas Malvinas y la violación de los derechos humanos allende la cordillera (Cisneros y Escudé 2000).
El presupuesto militar se redujo sustancialmente pasando del 3,4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en 1983 al 1,8 % en 1989. En este sentido, debe mencionarse también la sanción en 1987 de la Ley de Defensa Nacional que redefine la función de las Fuerza Armadas restringiendo su ámbito de acción a repeler o disuadir agresiones de origen externo (Battaglino 2013).
El Río Negro circuló inicialmente en forma quincenal convirtiéndose en semanario al año siguiente.
Héctor Borrat define al periódico independiente de información general como un actor político de naturaleza colectiva, cuyo ámbito de actuación es el de la influencia y no el de la conquista del poder institucional (Borrat 1989).
Este término refiere a los Territorios Nacionales, forma jurídico-administrativa impuesta, a partir de la sanción de la Ley 1532 de 1884, por parte del Estado Nacional a las tierras arrebatadas a los pueblos originarios. Esta ley impedía a los habitantes territorianos ejercer sus derechos políticos bajo el argumento de que carecían de una cultura cívica en razón de residir en espacios que estuvieron bajo dominio indígena. En este marco institucional la sociedad civil respondió constituyéndose como actor político haciendo escuchar su voz a través de la participación en las asociaciones y en la prensa local (Ruffini 2007).
Como afirma Irene Fonte Zarabozo (2003), los discursos que recorrer las páginas de los diarios son reproducidos o referidos en diversas formas, estableciendo una jerarquía de enunciadores. Estas variaciones se producen desde la selección y recontextualización misma de la palabra reproducida, lo cual determina sus efectos ideológicos.
Durante la dictadura militar, se desempeñó como jefe de policía de la Provincia de Buenos Aires, teniendo bajo su mando algunos de los centros clandestinos de detención más sanguinarios y tenebrosos que conoció la historia argentina.
Río Negro. 1984. “Camps se opone”. General Roca, agosto 19.
El general Agustín Alejandro Lanusse distaba mucho de ser la expresión del discurso dominante en las Fuerzas Armadas. En 1977, al conocerse el fallo que otorgaba a Chile la soberanía sobre las islas emplazadas en el canal, numerosos camaradas de armas lo sindicaron como responsable de esa “derrota diplomática” por haber firmado el acuerdo de 1971 con Salvador Allende, el cual permitió a la corono británica dirimir el conflicto de límites del Beagle. En esos años, también había sido acusado de no haber impedido el retorno del peronismo al poder, sumado a las sospechas de corrupción que la propia dictadura se encargó de propalar.
Río Negro. 1984. “Encontradas posiciones de exjefes militares”. General Roca, octubre 21.
En enero de 1979 el General Luciano Benjamín Menéndez fracasó en su intento por impedir el viaje del canciller argentino Pastor al Uruguay para firmar el acuerdo con Chile. El mismo implicó la aceptación de la mediación papal por parte de ambos países, y un mutuo compromiso de no utilizar la fuerza, retrotrayendo la situación militar a la existente en 1977 (Cisneros y Escudé 2000).
Río Negro. 1984. “Favorable acogida tuvo el compromiso conjunto”. General Roca, enero 24; Río Negro. 1984. “Investigan declaraciones de Menéndez sobre Beagle”. General Roca, julio 8.
En su análisis sobre las noticias y el periodismo, Stella Martini sostiene que para los medios la información recibida por los lectores va configurando los supuestos que permiten la rápida clasificación e interpretación de las nuevas noticias (Martín 2000).
Río Negro. 1984.“La exhumación del proceso”. General Roca, enero 4.
Río Negro. 1984.“¿Quién sembró de cadáveres la Argentina?”. General Roca, enero 18.
Río Negro. 1984.“Votar contra el fascismo”. General Roca, noviembre 23.
Río Negro. 1984. “Beagle: respalda la Iglesia una solución pacífica”. General Roca, agosto 9; Río Negro. 1984. “El episcopado respaldó la convocatoria por el Beagle”, General Roca, agosto 9.
Río Negro. 1984. “El papa propone una gran patria latinoamericana”, General Roca, octubre 13.
Río Negro 1984. “La solución por el Beagle está cerca dijo Silva Henriquez”, General Roca, julio 10.
Sostiene Cristian Medina Valverde que a la hora de los balances, existe un consenso en destacar esta iniciativa, denominada “Doctrina Alessandri”, como lo más relevante en materia de política exterior durante el gobierno de Jorge Alessandri. En noviembre de 1959 y en su intervención ante la OEA, en 1962, el presidente chileno señaló que su país había puesto énfasis en llamar a la conciencia del continente a favor de una lucha contra el armamentismo. La consecuencia de esta estrategia diplomática fue una situación paradojal ya que, por una parte, Chile estaba en su punto más bajo de poderío internacional y, por otra, gozaría de uno de los status más altos en el sistema internacional a lo largo de la década de los cincuenta y sesenta (Medina Valverde 2002, 224).
Desde su primera elección en febrero de 1946, el justicialismo (con diferentes nombres) jamás había sido derrotado en una contienda electoral nacional.
Río Negro. 1984.“Mayoría en favor de la consulta popular sobre la propuesta papal”. General Roca, julio 27; Río Negro. 1984.“Lúder no se opone y Bittel dice que la decisión “es la correcta”. General Roca, julio 27.
Río Negro. 1984. “Taiana destacó la necesidad de un acuerdo”. General Roca, agosto 24.
Río Negro. 1984. “¿Por la paz o por la guerra?”. General Roca, julio 30.
Río Negro. 1984. “Proyecto de diputados el PJ para un referéndum por el Beagle y la deuda”. General Roca, agosto 4; Río Negro. 1984. “El justicialismo analiza el diferendo”. General Roca, octubre 7; Río Negro. 1984. “Disconformidad en la consulta convocada sobre la cuestión del Beagle”. General Roca, agosto 11.
La fuerza simbólica de ese hecho acabó plasmándose en la expresión “el cajón de Herminio”, empleada vulgarmente para referirse a toda situación en la que alguna acción de un candidato define la elección en favor de su contrincante.
Río Negro.1984. “Esperando la propuesta papal”. General Roca, agosto 19.
Río Negro.1984. “Discrepancias entre miembros del Congreso”. General Roca, octubre 21.
El debate realizado el 15 de noviembre de 1984 fue transmitido por Canal 13 y moderado por Bernardo Neustadt, uno de los periodistas más influyentes del momento
Amossy y Pierrot sostienen que el estereotipo aparece ante todo como un instrumento de categorización que permite distinguir cómodamente un nosotros de un ellos (Amossy y Pierrot, 2001: 49).
Río Negro. 1984.“Caputo y Saadi debatieron sobre el Beagle”. General Roca, noviembre 16; Río Negro. 1984. “Fue desordenado el debate por el Beagle”. General Roca, noviembre 16.
Río Negro. 1984“Amplia repercusión tuvo el debate en torno al Beagle”. General Roca, noviembre 17.
Río Negro. 1984“Isabel Perón criticó a Saadi y apoyó al gobierno”. General Roca, noviembre 22.
Río Negro. 1984. “Pasado y Futuro”. General Roca, noviembre 20.
La movilización popular del 17 de octubre de 1945, exigiendo la liberación de Juan Domingo Perón es considerada como hito fundante del movimiento justicialista
Río Negro. 1984. “Votar contra el fascismo”. General Roca, noviembre 23.
Río Negro. 1984. “Perón en 1953 'Consigna de honor nacional'”. General Roca, noviembre 23.
Río Negro.1984. “Caputo viajó ayer hacia el Vaticano”. General Roca, enero 22.
Los llamados “Pactos de Mayo de 1902” constituyeron una bisagra en las relaciones binacionales al consagrar como “ley de oro”, para preservar la paz y la seguridad entre ambos países, el principio de Argentina en el Atlántico y Chile en el Pacífico. Este principio se vinculaba con la noción de “esferas de influencia" que establece la existencia de un predominio incontrastable de una Estado sobre una zona, tanto en lo militar como en lo político y económico (Lacoste 2005).
Marc Angenot define al fetiche como uno de los componentes del discurso dominantes, caracterizado como un “intocable” habitado por un maná del que son testimonio todas las vibraciones retóricas que los rodean (Angenot 2010: 41).
Es importante destacar que desde mayo de 1984 el gobierno radical impulsaba, junto a Brasil, México y Colombia, la negociación conjunta de la deuda latinoamericana con los organismos financieros y de las condiciones en que la región comercializaría sus productos en el mercado mundial (Rapoport 2005).
Río Negro. 1984. “Alfonsín criticó la discriminación a América Latina”. General Roca, noviembre 23.
Río Negro. 1984. “No habrá independencia si el continente se divide”. General Roca, julio 25; Río Negro. 1984. “Habrá consulta popular por el Beagle, anunció Alfonsín”. General Roca, julio 26; Río Negro.1984. “Consulta popular 30 días después de conocida la propuesta del papa”. General Roca, julio 26; Río Negro. 1984.“Alfonsín reiteró su respaldo a la unidad latinoamericana”. General Roca, agosto 10.
Río Negro. 1984.“Beagle: Alfonsín defendió el acuerdo con Chile”. General Roca, noviembre 22; Río Negro. 1984.“Alfonsín defendió el acuerdo y criticó el abstencionismo”. General Roca, noviembre 22.
Río Negro. 1984.“La abstención favorecerá a los partidarios de la dictadura”. General Roca, noviembre 22.
Río Negro. 1984. “Un riesgo calculado”. General Roca, julio 27; Río Negro. 1984. “¿Iniciativa improvisada?”. General Roca, agosto 6.
Río Negro. 1984. “Votar contra el fascismo”. General Roca, noviembre 23.
Río Negro. 1984. “El Naufragio del peronismo”. General Roca, diciembre 2.
Río Negro. 1984. “Al diablo con las ideologías”. General Roca, marzo 11.
Río Negro. 1984. “La identidad radical”. General Roca, noviembre 18.
Río Negro. 1984. “El naufragio del peronismo”. General Roca, octubre 2.
El proyecto establecía el traslado de la Capital Federal hacia Viedma, Carmen de Patagones y Guardia Mitre. En 1997, el histórico director del diario Río Negro se arrogaría la autoría de los fundamentos sobre los que se estructuró la argumentación oficial en favor de dicha medida
Río Negro. 1984. “Medidas del MPN para la consulta por el Beagle”. General Roca, noviembre 18.
Río Negro. 1984. “Instan a inmigrantes a votar por el “si”. General Roca, noviembre 22.
Río Negro. 1984. “A Pinochet habrá que echarlo” afirmó un ex-diputado chileno”. General Roca, agosto 20.
Río Negro. 1984. “Conclusiones de las jornadas por la paz y la libertad en Chile”. General Roca, agosto 22.
Con una dilatada historia de militancia dentro del partido radical, el barilochense Álvarez Guerrero trabajó en el Movimiento Nacional de Renovación y Cambio, nombre que adoptó la línea interna que lideraba el presidente Raúl Ricardo Alfonsín. Ya como gobernador rionegrino definía su doctrina como moral, humanista, federal y patriótica (Camino Vela 2013).
Río Negro. 1984. “Suscribieron un documento por el voto afirmativo”. General Roca, noviembre 24.
Río Negro. 1984. “Álvarez Guerrero se refirió al acuerdo por el Beagle”. General Roca, octubre 16.
Río Negro. 1984. “Se realizó en Roca el acto por la consulta”. General Roca, noviembre 24.
Río Negro. 1984. “El MPN a favor del acuerdo por el Beagle”. General Roca, noviembre 11.
Río Negro. 1984. “Abrumador respaldo al Si”. General Roca, noviembre 26.
Río Negro.1984. “Masiva afluencia en Río Negro y Neuquén”. General Roca, noviembre 26; Río Negro. 1984.“La ciudadanía rionegrina se pronunció masivamente por el si”. General Roca, noviembre 26 ; Río Negro. 1984. “Masivo apoyo al acuerdo con Chile”. General Roca, noviembre 26.

Referencias

Aboy Carles, Gerardo. 2010. "Raúl Alfonsín y la fundación de la Segunda República". En Discutir Alfonsín, comp., Roberto Gargarella, María Victoria Murillo & Mario Pecheny, 67-84. Buenos Aires: Siglo XXI.

Amossy, Ruth y Herschberg Pierrot. 2001. Estereotipos y clichés. Buenos Aires: Eudeba.

Angenot, Marc. 2010. El discurso social. Buenos Aires: Siglo XXI.

Azcoitia Alfredo. 2013. “El diario Río Negro (General Roca) y las representaciones sobre Chile durante los primeros años de la provincia: una trama multiescalar”. Pilquen. 16:1-11

Azcoitia, Alfredo. 2014. “El diario Rio Negro y la representación de "lo chileno" durante el conflicto del Beagle (1977-1978)”. REHIME. 07:50-71. http://www.rehime.com.ar/escritos/dossier/07prensaprov/dossier07-prensaprov-02.pdf

Azcoitia, Alfredo. 2014. “La fuga del penal de Rawson y los fusilamientos de Trelew según el diario Río Negro: tensiones políticas y operaciones discursivas”. Historia Caribe. 9 (25):181-213

Azcoitia, Alfredo. 2016. “Las representaciones sobre las relaciones argentino-chilenas en la prensa norpatagónica. Un análisis del diario Río Negro (1960-1984)”. Tesis doctoral, Universidad Nacional del Sur.

Azcoitia, Alfredo. 2017. “Argentina frente al gobierno de Allende, la mirada del diario Río Negro”. Estudios Fronterizos. 18 (36): 102-125.

Barelli Ana Inés y Alfredo Azcoitia. 2015. “Construcciones identitarias hegemónicas y estrategias socio-religiosas de visibilización de los migrantes latinoamericanos en San Carlos de Bariloche (1970-2000)”. Quinto Sol. 19 (2): 1-21.

Battaglino, Jorge. 2013. “La Argentina desde 1983: un caso de desmilitarización del sistema político” Revista SAAP.7:265-273. http://www.scielo.org.ar/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1853-19702013000200004&lng=es&tlng=es.

Bohoslavsky, Ernesto. 2009. El complot patagónico. Nación, conspiracionismo y violencia en el sur de Argentina y Chile (siglos XIX y XX).Buenos Aires: Prometeo.

Borrat, Héctor. 1989. El periódico, actor político. Barcelona: Gustavo Pili.

Calsamiglia Blancafort, Helena y Tusón Valls Amparo. 1999. Las cosas del decir. Manual de análisis del discurso. Barcelona: Ariel.

Camino Vela, Francisco. 2013. “La dinámica política en la Provincia de Río Negro (Argentina) desde mediados del siglo XX: el predominio de la Unión Cívica Radical”. Tesis doctoral, Universidad de Sevilla.

Chouliaraki, Lilie y Fariclough Norman. 1999. Discourse in Late Modernity Rethinking Critical Discourse Analysis. Edinburgh-Cambridge, Edinburgh University Press.

Cisneros Andrés y Carlos Escudé. 2000. Historia general de las Relaciones Exteriores de la República Argentina (1806-1989).Buenos Aires: Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales, http://www.argentina-rree.com/historia.htm.

Gomes, Gabriela. 2013. “Las trayectorias políticas de los funcionarios nacional-corporativistas del Onganiato”. Ponencia presentada en las Jornada Recuperando trayectorias intelectuales en el Estado. Argentina en la segunda mitad del siglo XX, en Buenos Aires. Argentina.

Lacoste, Pablo.2005. “Argentina y Chile (1810-2000)”. En Argentina Chile y sus vecinos. Tomo I, comp. Pablo Lacoste, 29-91. Mendoza: Caviar Blue.

Lesgart, Cecilia. 2003. Uso de la transición a la democracia. Ensayo, ciencia y política en la década del 80. Rosario: Homo Sapiens.

Maingueneu, Dominique y Patrick Charaudeau. 2005. Diccionario de análisis del discurso. Buenos Aires: Amorrortu editores.

Manzano Iturra y Karen Isabel. 2014. “Arbitraje y mediación. Los medios jurídicos tras el conflicto del Beagle”. Revista de Historia Americana y Argentina. 49 (1): 47-64.

Martín Rojo, Luisa. 1997. “El orden social de los discursos”. Discurso. 21/22: 1-37.

Martini, Stella. 2000. Periodismo, noticia y noticiabilidad. Buenos Aires: Norma.

Medina Valverde, Christian. 2004. “Chile y la integración latinoamericana: política exterior, acción diplomática y opinión pública, 1960-1976”. Tesis Doctoral, Universidad Complutense de Madrid.

Navarro Floria, Pedro y María Andrea Nicoletti. 2014. Historia del Neuquén. Neuquén: Euduco.

Nicoletti, María Andrea. 2002. “El obispo de Nevares y la Pastoral de Migraciones: la defensa de los derechos humanos de los migrantes chilenos (1973-1990)”. RET. 7:181-204.

Quiroga, Hugo. 2005. “El tiempo del proceso”. En Dictadura y democracia. (1976-2001). Nueva Historia. Tomo X, dir., Juan Suriano, 33-86. Buenos Aires: Sudamericana.

Rapoport, Mario.2005. Historia económica, política y social de la Argentina (1880-2003).Buenos Aires: Ariel.

Río Negro. 1979. “El general Sasiaiñ ordenó el repliegue de efectivos militares concentrados en Junín y Bariloche”. General Roca, enero 29.

Río Negro. 1984. “La exhumación del proceso”. General Roca, enero 4.

Río Negro. 1984. “Beagle: El acuerdo será para los próximos meses”. General Roca, enero 5.

Río Negro. 1984. “¿Quién sembró de cadáveres la Argentina”. General Roca, enero 18.

Río Negro. 1984. “Caputo viajó ayer hacia el Vaticano”. General Roca, enero 22.

Río Negro. 1984. “Favorable acogida tuvo el compromiso conjunto”. General Roca, enero 24.

Río Negro. 1984. “Al diablo con las ideologías”. General Roca, marzo 11.

Río Negro. 1984. “Investigan declaraciones de Menéndez sobre Beagle”. General Roca, julio 8.

Río Negro. 1984. “La solución por el Beagle está cerca dijo Silva Henriquez”. General Roca, julio 10.

Río Negro. 1984. “No habrá independencia si el continente se divide”. General Roca,

julio 25.

Río Negro. 1984. “Habrá consulta popular por el Beagle, anunció Alfonsín”. General Roca, julio 26.

Río Negro. 1984. “Consulta popular 30 días después de conocida la propuesta del papa”. General Roca, julio 26.

Río Negro. 1984. “Mayoría en favor de la consulta popular sobre la propuesta papal”. General Roca, julio 27.

Río Negro. 1984. “Lúder no se opone y Bittel dice que la decisión “es la correcta”. General Roca, julio 27.

Río Negro. 1984. “Un riesgo calculado”. General Roca, julio 27.

Río Negro. 1984. “¿Por la paz o por la guerra?”. General Roca, julio 30.

Río Negro. 1984. “Proyecto de diputados el PJ para un referéndum por el Beagle y la deuda”. General Roca, agosto 4.

Río Negro. 1984. “¿Iniciativa improvisada?”. General Roca, agosto 6.

Río Negro. 1984. “El episcopado respaldó la convocatoria por el Beagle”. General Roca, agosto 9.

Río Negro. 1984. “Beagle: respalda la Iglesia una solución pacífica”. General Roca, agosto 9.

Río Negro. 1984. “Alfonsín reiteró su respaldo a la unidad latinoamericana”. General Roca, agosto 10.

Río Negro. 1984. “Disconformidad en la consulta convocada sobre la cuestión del Beagle”. General Roca, agosto 11.

Río Negro. 1984. “Camps se opone”. General Roca, agosto 19.

Río Negro. 1984. “Esperando la propuesta papal”. General Roca, agosto 19.

Río Negro. 1984. “A Pinochet habrá que echarlo” afirmó un ex-diputado chileno”. General Roca, agosto 20.

Río Negro. 1984. “Discrepancias entre miembros del Congreso”. General Roca, octubre 21.

Río Negro. 1984. “Conclusiones de las jornadas por la paz y la libertad en Chile”. General Roca, agosto 22.

Río Negro. 1984. “Taiana destacó la necesidad de un acuerdo”. General Roca, agosto 24.

Río Negro. 1984. “El naufragio del peronismo”. General Roca, octubre 2.

Río Negro. 1984. “El justicialismo analiza el diferendo”. General Roca, octubre 7.

Río Negro. 1984. “El papa propone una gran patria latinoamericana”. General Roca, octubre 13.

Río Negro. 1984. “Álvarez Guerrero se refirió al acuerdo por el Beagle”. General Roca, octubre 16.

Río Negro. 1984. “Encontradas posiciones de ex jefes militares”. General Roca, octubre 21.

Río Negro. 1984. “El MPN a favor del acuerdo por el Beagle”. General Roca, noviembre 11.

Río Negro. 1984. “Fue desordenado el debate por el Beagle”. General Roca, noviembre 16.

Río Negro. 1984. “Caputo y Saadi debatieron sobre el Beagle”. General Roca, noviembre 16.

Río Negro. 1984. “Amplia repercusión tuvo el debate en torno al Beagle”. General Roca, noviembre 17.

Río Negro. 1984. “La identidad radical”. General Roca, noviembre 18.

Río Negro. 1984. “Medidas del MPN para la consulta por el Beagle”. General Roca, noviembre 18.

Río Negro. 1984. “Pasado y Futuro”. General Roca, noviembre 20.

Río Negro. 1984. “Alfonsín defendió el acuerdo y criticó el abstencionismo”. General Roca, noviembre 22.

Río Negro. 1984. “Beagle: Alfonsín defendió el acuerdo con Chile”. General Roca, noviembre 22.

Río Negro. 1984. “Isabel Perón criticó a Saadi y apoyó al gobierno”. General Roca, noviembre 22.

Río Negro. 1984. “La abstención favorecerá a los partidarios de la dictadura”. General Roca, noviembre 22.

Río Negro. 1984. “Instan a inmigrantes a votar por el “si”. General Roca, noviembre 22

Río Negro. 1984. “Perón en 1953 'Consigna de honor nacional'”. General Roca, noviembre 23.

Río Negro. 1984. “Votar contra el fascismo”. General Roca, noviembre 23.

Río Negro. 1984. “Alfonsín criticó la discriminación a América Latina”. General Roca, noviembre 23.

Río Negro. 1984. “Suscribieron un documento por el voto afirmativo”. General Roca, noviembre 24.

Río Negro. 1984. “Se realizó en Roca el acto por la consulta”. General Roca, noviembre 24.

Río Negro. 1984. “Masiva afluencia en Río Negro y Neuquén”. General Roca, noviembre 26.

Río Negro. 1984. “Masivo apoyo al acuerdo con Chile”. General Roca, noviembre 26.

Río Negro. 1984. “Abrumador respaldo al Si”. General Roca, noviembre 26.

Río Negro. 1984. “La ciudadanía rionegrina se pronunció masivamente por el si”. General Roca, noviembre 26.

Rodríguez, Jesús. 2011. El caso Chile. La guerra Fría y la influencia argentina en la transición democrática. Buenos Aires: Capital Intelectual.

Ruffini, Martha. 2001. “Autoridad, legitimidad y representaciones políticas. Juegos y estrategias de una empresa perdurable: Río Negro y La Nueva Era (1904-1930)”. En Pasiones sureñas. Prensa, cultura y política en la frontera norpatagónica (1884-1946), dir., Leticia Prislei, 101-126. Buenos Aires: Entrepasados, Prometeo.

Ruffini, Martha. 2007. La pervivencia de la República posible en los territorios nacionales. Poder y ciudadanía en Río Negro. Buenos Aires: Universidad Nacional de Quilmes.

Russell, Roberto y Mónica Hirst. 1987. Democracia y política exterior: los casos de Argentina y Brasil. Buenos Aires: Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales.

Verón, Eliseo. 1987. “La palabra adversativa. Observaciones sobre la enunciación política”. En El discurso político, Eliseo Verón, et al, 13-26. Buenos Aires: Ediciones Hachette.

Villegas, Osiris Guillermo. 1969. Políticas y estrategias para el desarrollo y la Seguridad Nacional. Buenos Aires: Pleamar.

Vommaro, Gabriel. 2006. “Cuando el pasado es superado por el presente: las elecciones presidenciales de 1983 y la construcción de un nuevo tiempo político en la Argentina”. En Los años de Alfonsín ¿El poder de la democracia o la democracia del poder?, coord., Alfredo Raúl Pucciarelli. Buenos Aires: Siglo XXI.

Cómo citar

APA

Azcoitia, A. (2018). El plebiscito de 1984 por el canal Beagle en el discurso de la prensa patagónica argentina. El caso del diario Río Negro. HiSTOReLo. Revista de Historia Regional y Local, 10(20), 237–278. https://doi.org/10.15446/historelo.v10n20.66047

ACM

[1]
Azcoitia, A. 2018. El plebiscito de 1984 por el canal Beagle en el discurso de la prensa patagónica argentina. El caso del diario Río Negro. HiSTOReLo. Revista de Historia Regional y Local. 10, 20 (jul. 2018), 237–278. DOI:https://doi.org/10.15446/historelo.v10n20.66047.

ACS

(1)
Azcoitia, A. El plebiscito de 1984 por el canal Beagle en el discurso de la prensa patagónica argentina. El caso del diario Río Negro. Historelo.rev.hist.reg.local 2018, 10, 237-278.

ABNT

AZCOITIA, A. El plebiscito de 1984 por el canal Beagle en el discurso de la prensa patagónica argentina. El caso del diario Río Negro. HiSTOReLo. Revista de Historia Regional y Local, [S. l.], v. 10, n. 20, p. 237–278, 2018. DOI: 10.15446/historelo.v10n20.66047. Disponível em: https://revistas.unal.edu.co/index.php/historelo/article/view/66047. Acesso em: 19 abr. 2024.

Chicago

Azcoitia, Alfredo. 2018. «El plebiscito de 1984 por el canal Beagle en el discurso de la prensa patagónica argentina. El caso del diario Río Negro». HiSTOReLo. Revista De Historia Regional Y Local 10 (20):237-78. https://doi.org/10.15446/historelo.v10n20.66047.

Harvard

Azcoitia, A. (2018) «El plebiscito de 1984 por el canal Beagle en el discurso de la prensa patagónica argentina. El caso del diario Río Negro», HiSTOReLo. Revista de Historia Regional y Local, 10(20), pp. 237–278. doi: 10.15446/historelo.v10n20.66047.

IEEE

[1]
A. Azcoitia, «El plebiscito de 1984 por el canal Beagle en el discurso de la prensa patagónica argentina. El caso del diario Río Negro», Historelo.rev.hist.reg.local, vol. 10, n.º 20, pp. 237–278, jul. 2018.

MLA

Azcoitia, A. «El plebiscito de 1984 por el canal Beagle en el discurso de la prensa patagónica argentina. El caso del diario Río Negro». HiSTOReLo. Revista de Historia Regional y Local, vol. 10, n.º 20, julio de 2018, pp. 237-78, doi:10.15446/historelo.v10n20.66047.

Turabian

Azcoitia, Alfredo. «El plebiscito de 1984 por el canal Beagle en el discurso de la prensa patagónica argentina. El caso del diario Río Negro». HiSTOReLo. Revista de Historia Regional y Local 10, no. 20 (julio 1, 2018): 237–278. Accedido abril 19, 2024. https://revistas.unal.edu.co/index.php/historelo/article/view/66047.

Vancouver

1.
Azcoitia A. El plebiscito de 1984 por el canal Beagle en el discurso de la prensa patagónica argentina. El caso del diario Río Negro. Historelo.rev.hist.reg.local [Internet]. 1 de julio de 2018 [citado 19 de abril de 2024];10(20):237-78. Disponible en: https://revistas.unal.edu.co/index.php/historelo/article/view/66047

Descargar cita

CrossRef Cited-by

CrossRef citations0

Dimensions

PlumX

Visitas a la página del resumen del artículo

1052

Descargas

Los datos de descargas todavía no están disponibles.